Tiempos de Nigromante

Arturo Rueda
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06/11/2012

Un dramático 27 de noviembre

El jaloneo es feroz: los capitanes de Enrique Peña Nieto disputan la integración del gabinete palmo a palmo. Los grupos dominantes, mexiquenses contra hidalguenses, se disputan funciones, dependencias, presupuestos. De mañana a mañana unos nombres bajan, otros suben, al mismo ritmo que sueños y ambiciones. Un día convencen al presidente electo de crear la Secretaría del Interior, y al otro un zar de seguridad. La lista de secretarios no es la parte más compleja, sino también definir subsecretarios y directores de organismos descentralizados. Aunque la administración pública federal es inmensa, siempre acaban faltando lugares. Pero el desvelo de muchos mexicanos, incluidos varios poblanos que ya se sueñan desembarcando al lado de Peña Nieto y sus huestes, tiene como deadline el 27 de noviembre. Y de esos movimientos incluso depende Rafael Moreno Valle, quien puede perder a varios secretarios en el camino.

En la lista de suspirantes al gobierno federal destacan dos nombres: Luis Maldonado Venegas y Ardelio Vargas Fosado. En un santiamén, el gobernador poblano puede perder a su secretario de Seguridad Pública y a su titular en la SEP. Nada más y nada menos. Dos huecos en el organigrama político difíciles de cubrir. El primero por su eficiencia y mano dura. El segundo por tratarse del recambio inmediato de Fernando Manzanilla Prieto al frente de la SGG. Si Maldonado se va al gobierno federal, y Manzanilla renuncia en pos de la candidatura a la alcaldía, ya sea en rebelión abierta o en acuerdo por ganar la carrera de los Fantásticos, ¿quién se queda al frente de la operación política y de la Secretaría General de Gobierno?

Irónicamente, parte del destino de Manzanilla depende del futuro político del todavía titular de la SEP. Luis Maldonado ha apostado todas sus canicas a integrarse al equipo de Enrique Peña Nieto, tanto que se la vive en el Distrito Federal participando en la elaboración del Plan Nacional de Desarrollo. Nadie le ha asegurado un puesto, pero tanto se ve abandonando Puebla el 27 de diciembre, pues incluso ya promueve a su sucesor en la SEP, un subsecretario del que a ciencia cierta nadie conoce sus méritos porque tampoco es poblano.

Ardelio Vargas tiene vinculación directa con Enrique Peña Nieto, y es un serio candidato a ocupar una posición estratégica en la estructura de seguridad pública. Recordemos que Vargas Fosado ya tuvo responsabilidades de ese nivel en los sexenios panistas, cuando incluso se hizo cargo al mismo tiempo de la Policía federal y de la AFI. Incluso enfrentó con el gobernador mexiquense la investigación de la Suprema Corte de Justicia por el operativo en Atenco. Y en público y en privado el presidente electo reconoce el trabajo del serrano. Reiteramos: sus posibilidades son reales.

El 27 de noviembre puede dejar a Moreno Valle sin secretarios de Educación y de Seguridad Pública. Pero en una carambola del destino hasta titular de la SGG: una variante poco analizada es la amistad entre Manzanilla y Luis Videgaray desde sus tiempos universitarios en el ITAM. Entre que si Manzanilla abandonó o no la carrera de los Fantásticos, o si en verdad se deterioró su relación con el gobernador, el titular de la SGG puede abandonar Puebla por la puerta grande al invitarlo su amigo Videgaray a una posición importante en el gobierno federal.

Y más dramatismo: Puebla puede quedarse incluso sin rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Enrique Agüera también será notificado el 27 de noviembre si llegará a la dirección del Conacyt o a la Subsecretaría de Educación Superior, o incluso si prefieran que se quede en la entidad para preparar una eventual candidatura a la alcaldía. Pero nadie ha imaginado que ocurrirá si a Agüera le dan el ansiado “sí”: deberá preparar una sucesión con urgencia. Y por supuesto, Alfonso Esparza sigue siendo el mejor colocado, aunque nunca debe descartarse una sorpresa.

Sorpresivo también puede ser el adiós a Puebla de Sergio Ramírez Robles, el odiado titular de Comunicación Social, que en el marco de la crisis de las demandas a periodistas, también puede tener una salida digna en el gobierno federal. Por supuesto, Marcelo García Almaguer se prepara a asumir la relación con los medios de comunicación, pues se trata de un experto en campañas. Y es que el calendario dicta que 2013 será la madre de todas las batallas, por lo que el soldado Marcelo deberá librar una batalla más.

Luis Maldonado Venegas, Ardelio Vargas Fosado, Fernando Manzanilla Prieto, Enrique Agüera, Sergio Ramírez Robles. Y solamente para redondear la lista, el titular del Consejo para la Cultura y las Artes, Saúl Juárez, también tiene invitación para irse al gobierno federal. El destino de todos se definirá el 27 de noviembre. Y también cómo Moreno Valle reorganizará sus fuerzas.