Los nombres de Rafael Moreno Valle y Humberto Aguilar, así como el de Ana Teresa Aranda, podrían configurarse como los tres finalistas que competirán en el 2010. Y Fraile y Ángel Alonso tendrán que alinearse en uno y otro bando.


Tiempos de Nigromante


Arturo Rueda


La reforma estatutaria del PAN


Las familias custodias de Acción Nacional en Puebla perderán la mayor parte de su poder y con ello el control sobre la candidatura al gobierno estatal de 2010. La propuesta de reformas estatutarias que presentó ayer Germán Martínez al panismo nacional tiene un beneficiario claro en Puebla y se llama Rafael Moreno Valle. Y es que por primera vez, de aprobarse dicha propuestas elaborada por una comisión de notables, los candidatos serían electos por miembros activos y adherentes, cuando hasta hoy una pequeña minoría de catorce mil activos hacía y deshacía con Acción Nacional.

 

Pero no solo eso: los grupúsculos del estilo “Pablos”, “Caimanes” y “Frailes”, que fundaron su poder en controlar el padrón de militantes y con ellos la celebración de convenciones de designación de candidatos, van a desaparecer. Con la propuesta, se crea un Registro Nacional de Afiliaciones y una Comisión Nacional de Elecciones que desde México centralizará los procesos de designación de candidatos. Así, los beneficiarios de años del sistema cerrado, como Ángel Alonso Díaz Caneja o Paco Fraile, podrán irse despidiendo de la carrera.

 

El Partido Acción Nacional, ante la crisis de resultados que tuvo en 2007 y los conflictos internos que en todo el país se han producido por la confiscación del partido que han realizado algunas familias, debía decidir continuar cerrado a la sociedad o abrirse, fundamentalmente en la selección de abanderados. La patrimonialización de los procesos de selección de candidatos le funcionó durante décadas al PAN mientras eran oposición. Pero hoy, siendo un partido en el poder que requiere llevar sus triunfos federales a los gobiernos estatales y municipales, se ha convertido en un sistema arcaico. La propuesta de renovación de los estatutos la empezó el inefable Manuel Espino convocando a un grupo de notables, un proceso culminó ayer con la presentación del proyecto en la Reunión de Nacional de Dirigentes Estatales. Y el único poblano que recibió invitación personalísima de Germán Martínez fue Rafael Moreno Valle.

 

La atención se centró principalmente sobre el método y quiénes pueden participar de la selección de abanderados. El método, hasta hoy, es cerrado y sólo participan miembros activos en las famosas convenciones. Y para ser activo primero se debe ser adherente, pero el tránsito entre una y otra calidad es controlado por la estructura burocrática de los comités municipales y locales. Así, por ejemplo, el mercado interno de Acción Nacional en todo el estado apenas llega a los catorce mil miembros activos, cuando se calcula que la fuerza de los adherentes es mayor, pues estos llegarían casi a los 80 mil. Paco Fraile, Ángel Alonso y todos aquellos que han lucrado con la manipulación de los padrones siempre han bloqueado la llegada de nuevos miembros activos.

 

El monopolio de las familias custodias está por acabar, y eso beneficiará a Moreno Valle y a Humberto Aguilar. De acuerdo con el proyecto presentado, miembros activos y adherentes tendrán el mismo derecho para selecciones a sus abanderados. El partido se abre parcialmente porque Germán Martínez tuvo miedo de hacerlo totalmente, esto es, de permitir las consultas abiertas a la ciudadanía. Además, el monopolio se cierra también porque ahora será más fácil convertirse en adherente, ya que los candados como los famosos formatos de afiliación se acaban, y ahora podrán inscribirse hasta por Internet.

 

Los comités municipales y estatales pierden poder, además, porque tampoco controlarán el padrón de militantes, y tampoco podrán convocar los procesos de selección de candidatos. El control del padrón ahora recaerá en el Registro Nacional de Miembros, quien emitirá los nombres de aquellos que pueden participar, sin que los Pablos, por ejemplo, puedan meterle mano. Y por si fuera poco, las convenciones famosas desaparecen para dar paso a centros de votación que deberán colocados, por lo menos, uno en cada distrito electoral con urnas, funcionarios partidistas y representantes de candidatos.

 

Los cambios profundos sacudirán al PAN y sus estructuras locales. En el 2010, por ejemplo, el Comité Directivo Estatal no lanzará la convocatoria para elegir abanderado, sino que lo que hará una Comisión Nacional de Elecciones que definirá hasta un máximo de tres precandidatos para la contienda interna, con lo que acabará el vicio de postularse para conseguir otras posiciones o forzar la negociación. Los dirigentes locales y municipales, además, para ser candidatos deberán abandonar el cargo un año antes de la elección.

 

Imaginemos el escenario en el 2010: si actualmente en Puebla se habla de 14 mil miembros activos y 80 mil adherentes, más los que se inscriban al partido en los próximos dos años, hablaríamos que alrededor de 200 mil panistas que elegirían a su candidato al gobierno del estado. Un cambio cualitativo absoluto, y que necesariamente cambiarás las lógicas que habíamos visto en los últimos 20 años, y necesariamente provocará un cambio también en los liderazgos.

 

El proyecto de Germán Martínez, dicen las fuentes, ya está planchado entre los grupos panistas, y su aprobación final se ha programado para abril, en la Asamblea Nacional. Y así, los nombres de Rafael Moreno Valle y Humberto Aguilar, así como el de Ana Teresa Aranda, podrían configurarse como los tres finalistas que competirán en el 2010. Y Fraile y Ángel Alonso tendrán que alinearse en uno y otro bando.

 

*** Suspenden los cambios de última hora. Extra, extra, el embrollo de Valentín Meneses y Rómulo Arredondo por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes provocó un nuevo encontronazo en el gabinete estatal. Nuevas fuentes nos informan que el problema radica en que Valentín Meneses está considerado en la lista de candidatos a diputados federales por el distrito de Ajalpan. Y si lo hicieran secretario, únicamente estaría ahí 8 o 9 meses, y Marín tendría que hacer un nuevo cambio.

 

Por ello el gobernador le ha propuesto irse a Carreteras de Cuota y luego a la candidatura a la diputación federal. Pero el compadre sigue necio en ser secretario. Las fuentes dicen que el próximo viernes 14 de marzo se harían los cambios, aunque mañana Blanca Laura Villeda ofrecerá una rueda de prensa para despedirse.

 

Haciendo los cambios el viernes, las molestias serán resueltas en Semana Santa.

 



 
 

 

 
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