Se trata, dicen los antropólogos, de un problema de voracidad generacional presente en todas las culturas del mundo. Un conflicto clásico de poder. El sucesor, vigoroso e impetuoso, no ve la hora en tomar el lugar del padre.

 

Tiempos de Nigromante


Arturo Rueda


Marinistas vs zavalistas

 

Ocurrió en la gira del gobernador por San Pedro Cholula el martes pasado. La seguridad del gobernador Marín se había apostado afuera de la Casa de la Cultura en el municipio, esperando la llegada del mandatario, del alcalde Covarrubias y el resto de la comitiva. De pronto, una camioneta negra se estacionó justo enfrente del recinto, tapando el acceso de la suburban del gobernador. El jefe de ayudantes pidió al chofer de la unidad que se moviera. La respuesta dejó helados al cuerpo de seguridad.

 

— Esta es la camioneta del Lic. Zavala. Y de aquí no nos mueve nadie porque su lugar siempre debe estar al frente—, adujo, prepotente, la escolta del delfín.

—Quien debe estar siempre al frente es el gobernador—, respondió el jefe de ayudantes.
—Es lo que piensas. Pero Zavala es igual que el gobernador, y vas a ver como te va ir después del 2010 si la sigues haciendo de pedo—, atajó el jefe de ayudantes del secretario de Desarrollo Social.

 

Cuando se acaban los argumentos, llega la hora de los madrazos. En vez de seguir discutiendo, la ayudantía del gobernador recurrió a las manos para defender la honra de su gobernador frente a la soberbia de la escolta zavalista. Y la discusión sobre quién tiene más poder –y mejor lugar de estacionamiento-, si Marín o Zavala, fue arreglada con los puños.

 

Sí, como lo lee. Seguridad marinista contra seguridad zavalista. Así se las gasta el delfín.

 

Convivir con los demonios no es nada sencillo. Uno de los grandes problemas de la inteligencia es la incapacidad para leer correctamente la realidad. Por ejemplo, sentirse como la fuente de poder sin serlo realmente. En otras palabras, sentirse el gobernador sin serlo aún. Esta ficción ya le ha traído problemas anteriormente a Javier López Zavala en relación con la única y auténtica fuente de poder real, Mario Marín. El exacerbado protagonismo del entonces secretario de Gobernación, fincado en aquella promoción de ser “el jefe del gabinete” y el “responsable de la se-gu-ri-dad y tran-qui-li-dad en el estado” trajo como consecuencia su despido de malas maneras y el relevo de Mario Montero.

 

Se trata, dicen los antropólogos, de un problema de voracidad generacional presente en todas las culturas del mundo. Un conflicto clásico de poder. El sucesor, vigoroso e impetuoso, no ve la hora en tomar el lugar del padre. El rey menguante, maduro y en la cima de su poder, mira entre divertido y preocupado las ansias de novillero del hijo.

 

Un buen principio para entender la situación sería analizar la película china “La maldición de la flor amarilla”. En ella, el emperador le dice a su hijo “no trates de tomar por la fuerza lo que sólo yo te puedo dar”. El hijo no entiende y termina armando una revuelta militar en contra del padre.

 

Una historia semejante sólo tiene un desenlace. El padre que confía demasiado en su sucesor, casi siempre acaba muerto. O sin lugar para estacionarse.

 

*** Tesis académica. Un brillante estudiante de Ciencias de la Comunicación en la UPAEP se tituló ayer con una tesis de grado titulada “La protección de los medios locales de comunicación al gobernador en la marco del escándalo Cacho”. Las conclusiones, que empezaremos a publicar desde el lunes, establecen que a lo largo de la crisis provocada por la detención de la periodista, sólo un medio de comunicación actuó con independencia y credibilidad.

 

Se trata del periódico que usted tiene en sus manos. Y no lo decimos nosotros.

 

*** Lingotes para un secretario. La próxima semana le voy a relatar la historia de un funcionario marinista que, después de hacer tanto dinero y del miedo a que lo ocurra algo semejante a lo que le pasó a Zhenli Ye Gon, se mandó a hacer lingotes de oro para ocultar su riqueza malhabida. Ajá, como los nazis.

 

Así como lo lee. Lingotes de oro.

 

*** El maridaje Zavala-IPJ. “Me permito presentarme como un ciudadano poblano, nada más. Y es que leí del apoyo que nuestro gobierno de nueva generación ha estampado a través de un convenio con los jóvenes, con la promesa de la política poblana del futuro, me refiero al grupo de Francisco Ramos Montaño por medio de la SEDESO.

 

“Y no podía ser mejor el ejemplo de que el ex partidazo no tenga los activos juveniles para cubrir las necesidades políticas de las próximas generaciones y los tenga que comprar, a costa de los sueldos de cientos de trabajadores del gobierno del estado que próximamente quedaran despedidos. ¿No es un caso curioso?

 

“2.5 millones de pesos para apoyar a la juventud poblana (o más bien a un selecto grupo de la juventud poblana) Y cientos de jóvenes poblanos se quedarán sin recursos por falta de billete.

 

“¿La dependencia? No importa por el momento, ya se verá en publico quienes son los afectados. Más que curiosidad, es una verdadera succión láctica

 



 
 

 

 
Todos los Columnistas