Como no pueden ganarla por la buena, la tríada Alcalá-Estefan-Armenta han decidido enlodar la elección 2016 y tratar de ganarla por la mala. Ahora inicia la cuenta atrás, pues cada día es un día menos, y también llega la hora de las trincheras. En medio de un baño de mierda, tal como lo adelantamos la semana anterior, Antonio Gali Fayad deberá conservar la ventaja que acumuló en los últimos dos meses. Y el PRI, a bayoneta calada o con el ventilador de mierda, darle una patada al tablero con la esperanza de que un nuevo reacomodo le favorezca para entregarle buenas cuentas a Emilio Gamboa.

Una guerra entra a la etapa de trincheras cuando ya ninguno de los adversarios puede avanzar. Dos semanas resistió sin aclarar Alcalá a las investigaciones periodísticas sobre su patrimonio. Su pecado no es ser millonaria, sino mentir en su 3de3 para dar la apariencia de una política austera. Pero no lo es, de acuerdo con las publicaciones de Milenio Puebla, el portal Central, Sexenio y CAMBIO: hizo fortuna con su carrera política, y una parte de esa riqueza no es legítima, porque proviene de otorgarse obra pública a sí misma a través de un tercero que luego se volvió su socio, además de darle permisos fast track a su tía para poner una gasolinera de la que ahora es dueña en un 25 por ciento

Pillada con los dedos en la puerta, Blanca se escuda en los argumentos de la difamación y la campaña negra, pasando por alto que ella misma reconoció que es socia al 50 por ciento de Estilos Constructivos Sustentables SA de CV y 25 por ciento de la Gasolinera que autorizó fast track para su tía. Y que las investigaciones de Milenio Puebla y Central se han sustentado en documentos que se encuentran en el Instituto Registral y Catastral, así como en los ayuntamientos de Puebla y Cuautlancingo. ¿Esos registros son falsos o alterados? ¿No puede desmentir los documentos?

A la Nopalera Alcalá se avecina otro escándalo, de la que ella misma ya advirtió ayer preventivamente en su rueda de prensa para retar a Gali: su nueva y misteriosa casa. Se sabe que la senadora vivió muchos años en la Calera, incluso durante su trienio. Pero ya no vive ahí desde hace algún tiempo, según un audio que podrá escuchar al final de esta columna. Y aunque nadie conoce la ubicación de su nuevo y misterioso hogar, no incluido en su 3de3, ella reta a que los poblanos puedan visitarla para comparar estilos de vida con Antonio Gali.

Así que yo sí le tomo la palabra a la candidata tricolor:

Blanca, ¿cuándo grabamos Juego de Troles en tu casa?

También como adelantamos la semana pasada, el PRI se aferró en la cuarta semana de campaña a la “bomba” externa o golpe exógeno capaz de darle un nuevo rumbo a las preferencias. Así, La Jornada se prestó a publicar dos reportajes sin sustento alguno. En el primero refriteó los absurdos de #PanamáPapers presentados previamente en SDP por Federico Arreola —que no causaron ningún efecto en las encuestas— y luego una acusación sin ningún documento de por medio —lo que raya en la auténtica difamación— de que en los bares de los hijos del candidato han ocurrido escándalos de drogas.

El último “bombazo” —inexplicablemente publicado en viernes, lo cual reduce el impacto de la explosión— es el refrito sobre el patrimonio de Antonio Gali Fayad dado a conocer en 2013, y que fue juzgado por la sociedad poblana dándole la victoria en la lucha por la alcaldía. Ningún dato adicional presenta Reforma, salvo la actualización de la declaración patrimonial ya como alcalde y que fijó el monto en 33 millones de pesos.

¿Esos son los bombazos que presumían Estefan Chidiac y Rogelio Cerda? ¿Otra vez Panamá Papers y un refrito de 2013 que ya juzgaron los electores? ¿No hay material más explosivo que invenciones sobre líos con drogas? ¿No tienen documentos, audios, pruebas contundentes?

A falta de una bomba real, lo que se avecina es un ventilador de mierda con invenciones. Mañana, por ejemplo, Estefan Chidiac anunciará que prácticamente todos los secretarios y ex secretarios del gabinete morenovallistas han sido denunciados ante la PGR con base en las observaciones de la Auditoría Superior de la Federación de los periodos 2011-2015.

Será un nuevo ridículo, porque la mayor parte de las observaciones han sido solventadas. Y porque además, la ASF es la única entidad con facultades legales para presentar tales denuncias.

Lo importante para el eje Alcalá-Estefan-Armenta ya solamente es manchar, manchar, manchar. “Difama que algo queda, y en una de esas, pega”. El ventilador de mierda será histórico. Y quien pierda, perderá todo.