El segundo homicidio de un presidente municipal durante el sexenio morenovallista no será investigado como una ejecución, ya que de acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), la emboscada contra el edil de Huehuetlán El Grande, José Santamaría Zavala derivó de un intento de asalto, por lo que las hipótesis que apuntaban a un crimen pasional o con tintes tintes políticos no serán tomadas en cuenta por la autoridad ministerial.
La versión oficial de los hechos, según explicaron las autoridades, precisa que los ladrones trataron de frenar la camioneta del edil colocando piedras en la carretera estatal que conecta Huehuetlán con El Aguacate, persiguiéndolo mientras se dirigía a su casa la noche del lunes para robarle el dinero de la nómina, aunque el edil no lo portaba en ese momento.
A pesar que las diligencias del caso y las pruebas recolectadas no han sido agotadas, hasta el momento el principal testigo es Areli Esquivel Muñoz de 25 años de edad, quien en su calidad de secretaria particular de Santamaría Zavala lo acompañaba la noche del lunes cuando fueron emboscados y según declaró al Ministerio Público, los homicidas sólo se enfocaron en pedir el dinero, al tiempo en que registraban la camioneta del munícipe.
Por más de 12 horas recaban pruebas
De acuerdo con reportes policiales obtenidos por este medio, el homicidio de Santamaría Zavala ocurrió entre las 21 y 21:30 horas del lunes cuando la camioneta Toyota Rav-4, color gris y con placas UAL-9370 de Puebla, circulaba sobre el kilómetro 10 de la carretera que conecta a Huehuetlán El Grande con “El Aguacate”.
Luego que vecinos de la zona reportaran el hallazgo de la unidad y el cadáver del edil tirado a un costado de su camioneta, policías municipales acordonaron la zona y mantuvieron cerrado el paso al tránsito por cerca de 8:00 horas, hasta que al filo de las 6:00 horas de ayer se autorizó el levantamiento de cadáver registrado en la carpeta de investigación 226/2016/Tepexi.
Sin el cadáver de Santamaría Zavala en la zona, los servicios periciales de la Fiscalía General del Estado encabezados por su titular, Luis Galán Ruiz mantuvieron acordonado el predio donde quedó la unidad conocido como paraje “Tonale”, para levantar la evidencia pertinente.
Papeles revueltos que al parecer iban en la cajuela de la camioneta, casquillos calibre .9 milímetros y perforaciones de bala en la parrilla y parabrisas de la camioneta fueron analizados por los peritos en criminalística.
Disparos al tórax y rostro mataron al edil; su secretaria la única testigo
De forma extraoficial se sabe que el cadáver del edil presentaba al menos cinco perforaciones por proyectil de arma de fuego tanto en el rostro como en el tórax; aunque no se han revelado los resultados de la necropsia, se dedujo que estas lesiones fueron las que le causaron la muerte al funcionario.
Por su parte, la secretaria del Ayuntamiento de Huehuetlán El Grande, Areli Esquivel Muñoz es la única testigo presencial de los hechos ya que al momento del ataque ella acompañaba a Santamaría Zavala y de manera fortuita logró salvar la vida ya que no fue alcanzada por ninguno de los disparos de los asaltantes.
Aunque hasta la mañana de este martes la mujer no había sido localizada por las autoridades locales, la Fiscalía confirmó horas después que la mujer ya se había presentado a declarar por los hechos.