Con la globalización de la industria (y su lucrativo negocio), la moda se enfrenta a nuevos desafíos legales. A veces, la moda y el derecho se pueden juntar, porque ¿qué pasa si un diseñador pierde su nombre a manos de la casa para la que diseñaba (el caso de Galiano, Leger o Jil Sander)? ¿Puede una firma impedir que otros usen cierto elemento que caracteriza sus creaciones (como la suela roja de Louboutin)?
Susan Scafidi, abogada, creó el Fashion Law Institute de la Universidad de Fordham, en Nueva York. Su interés es el de investigar esta nueva rama del derecho que va más allá de los problemas de derecho de autor y se enfoca en las cuestiones de esta industria tan millonaria. Su alcance es global, pero con legislaciones especiales en cada país.
Al principio, lo difícil es que esta disciplina fuera aceptada con seriedad. Se la ve como frívola y se cree que es sólo una rama del derecho de la propiedad intelectual o del derecho corporativo. Pero no es así. Hasta la fecha, el centro ya tiene dos cursos especializados sobre el área: Máster en leyes sobre la Moda, y Master en Estudios de Leyes. En ambos se abordan temas como finanzas, la obtención de licencias, la sostenibilidad, y claro, casos del mundo de la moda.
Otras universidades ya le siguen, como la Loyola Law School de Los Ángeles, o el Instituto Marangoni de Milán.
La experta opina que todos los profesionales de la moda, por pequeños que sean, deben tomar en cuenta los marcos jurídicos que les pueden ayudar a que su trabajo se visto con más profesionalismo. Por ejemplo, la moda avanza a un ritmo tan vertiginoso, que muchos productos quedan obsoletos en poco tiempo. Esto requiere de un tratamiento jurídico especializado.
Los retos y problemas a los que se suelen enfrentar los diseñadores es la protección de la marca, de la creatividad, de la producción, la lucha entre canales de distribución, responsabilidad social corporativa, legislaciones éticas, y claro, la piratería, reflexiona José María Rojí, socio de CMS Albiñana & Suárez de Lezo y uno de los asesores del Fashion Law Congress organizado por el Ilustre Colegio de la Abogacía de Barcelona, que se celebró en 2011.
Mónica López, experta en fashion law de SNAbogados, cree que en los próximos años oiremos hablar cada vez más del derecho de la moda, «porque es un sector que mueve importantes intereses económicos». Añade otro caso recurrente: el uso de la imagen de personajes conocidos por parte de las marcas. «Rihanna tuvo un litigio con Topshop por usar una fotografía suya en unas camisetas», recuerda. Los tribunales le dieron la razón a la de Barbados.
Con datos de SModa