El presidente de México, Enrique Peña Nieto asistió a la inauguración del Hospital de Traumatología y Ortopedia donde comenzó a “despedirse” del gobernador Rafael Moreno Valle indicando que está en la recta final de su administración y aunque aún quedan muchas obras importantes por inaugurar, le sería materialmente imposible asistir a todas.

Durante su discurso, Peña Nieto se dijo muy agradecido con el gobernador por haber apoyado los programas del Gobierno de la República y por la hospitalidad que siempre le ha mostrado al inaugurar obras en el tiempo que lleva en la Presidencia.

“Muchas gracias por su hospitalidad.Sé que está en la recta final de su administración, ha sido amable en invitarme a la inauguración de distintas obras. Me resulta materialmente imposible acompañarle en todas, pero lo importante es que todas las obras que eventualmente se estén poniendo en servicio, producto del esfuerzo de su administración, sean para bien de toda la sociedad poblana y espero que sean muchas las obras que así sirvan a toda la sociedad”, indicó el presidente durante su discurso.

Enrique Peña Nieto también mencionó que el nombre del nuevo hospital “Doctor y General Rafael Moreno Valle” obedece no sólo a que sea el nombre del abuelo del gobernador, sino a la trayectoria de quien calificó como un “poblano distinguido”.

“Celebro y me adhiero al reconocimiento que se hace al Doctor y General Rafael Moreno Valle.Abuelo del señor gobernador del estado de Puebla (…).El hospital no lleva el nombre porque sea el abuelo del gobernador, lo lleva por la gran trayectoria que ha tenido”, dijo.

El presidente recalcó que en los tres años que van de su administración, se han invertido en Puebla 2 mil 600 millones de pesos en el tema de salud y se ha visto reflejado en hospitales como el del Niño Poblano, el Complejo Médico en Atlixco, además de hospitales generales y los Centros de Salud de Servicios Ampliados.

En su discurso, el gobernador Rafael Moreno Valle recalcó los avances que ha tenido la entidad de Puebla en acceso a la salud donde se pasó del lugar 26 en personas afiliadas a estos servicios en 2011 a tener una cobertura universal en el Seguro Popular. Esto, sumado a la política del Gobierno Federal garantizando que todos los ciudadanos gocen de plena salud.

Resaltó que durante 2014, el 30 por ciento de los pacientes que ingresaron a hospitales de la zona metropolitana, fue por lesiones traumáticas y la gran mayoría en carreteras y caminos, por lo que ello obedecía a desarrollar un inmueble dedicado y especializado en atender a pacientes con dichas lesiones.

“Era necesario contar con un hospital especializado que tuviera una ubicación estratégica, y en este contexto, gracias al decidido apoyo del presidente Enrique Peña Nieto fue posible construir este hospital que atenderá a pacientes con traumatismos”, señaló durante su discurso.

También se tomó un momento para recordar a su abuelo, que le da el nombre al nosocomio y a reconocer su trayectoria entre las que destacan ser fundador de la Sociedad Mexicana de Traumatología y Ortopedia, dirigir el Hospital Central Militar, ser secretario de Salubridad y Asistencia federal y presidente Nacional de la Cruz Roja Mexicana; sin embargo, indicó que su abuelo no pudo asistir a la ceremonia dadas sus condiciones de salud.

El nuevo hospital

El Hospital de Traumatología y Ortopedia que albergará a 603 trabajadores de la salud, cuenta con 80 camas, área de urgencias, terapia intensiva y media, 14 consultorios, 4 quirófanos, un banco de sangre, rayos “X” y fluoroscopía, el primero en su tipo en ese rubro, tomógrafo y zonas de terapia física y rehabilitación, además de un helipuerto para la llegada de pacientes transportados por ese medio.

Asimismo, el nuevo inmueble atenderá a más de 3.4 millones de ciudadanos y tendrá las instalaciones estatales del Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM) con el que se monitorearán las urgencias en todo el estado.

Su construcción comenzó el 8 de septiembre del 2014 y tuvo un costo de 755.52 millones de pesos, de los cuales 132.89 millones, es decir, el 17.5 por ciento, fue con aportaciones federales del Fondo de Previsión Presupuestal.