Borracho amenaza con tirarse de una torre, paraliza la 11 Sur


Decide bajarse de la estructura de más de 20 metros

 

A dos metros de tocar el suelo Plutarco Fortino Ruiz Vallejo se arrepintió cuando escucho los gritos de la muchedumbre. Fue entonces que los paramédicos pidieron a los curiosos que se alejaran del lugar y no sacaran más fotografías

 


Edmundo Velázquez

Notas Relacionadas

Notas Anteriores

 

Con un visible estado de ebriedad Plutarco Fortino Ruiz Vallejo escaló una torre de energía eléctrica de más de 20 metros y amenazó con quitarse la vida ayer por la tarde noche.


Su hazaña provocó que la avenida 11 Sur y el bulevar Las Torres permanecieran parcialmente cerrados por espacio dos horas, tiempo en el que el hombre de aproximadamente 43 años de edad la pensó bien y decidió bajarse poco a poco de la estructura mientras más de 200 mirones esperaban a verlos sano y salvo con los dos pies sobre la tierra.


La alerta del intento de suicidio llegó alrededor de las 5 de la tarde al servicio de emergencias  066 del Sistema Estatal de Seguridad cuando se informó que había un hombre amenazando e insultando con palabras altisonantes a la gente que lo observaba mientras subía a la torre ubicada en el camellón del cruce entre 11 Sur y Las Torres.


Alrededor de las cinco y media de la tarde motopatrullas de la Policía Municipal de Puebla llegaron para cerrar la vialidad, al lugar también llegó una grúa de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y miembros del cuerpo de Bomberos de la zona sur así como rescatistas del Sistema 066 de Emergencias.


Para el atardecer Plutrarco Ruiz había comenzado a descender de la torre y un bombero comenzó a hablarle desde la grúa que llevó CFE, pero permaneció medio metro bajo la punta de la estructura y se sentó por espacio de diez minutos más. Según los paramédicos presentes fue probable que el frío de la noche comenzó a calarle los huesos y provocó que se comenzara a entumir.


Mientras tanto, comenzó a llegar más gente que se mantuvo a la expectativa del borracho. Con gritos de “¡Ya bájate, cabrón!”, chiflidos y abucheos la gente respondió cuando Plutarco reinició su descenso, el cual evidenció aún más su estado de ebriedad.


A pesar de su poca agilidad Plutarco descendió por la estructura haciendo movimientos malabáricos con sus piernas para poder alcanzar las barras de la torre las cuales fue utilizando como peldaños.


A dos metros de tocar el suelo el borracho se arrepintió cuando escucho los gritos de la muchedumbre. Fue entonces que los paramédicos pidieron a los curiosos que se alejaran del lugar y no sacaran más fotografías.


—¡¿Qué me van a hacer?! ¡¿Qué me van a hacer?!—comenzó a gritar a los rescatistas Plutarco antes de bajarse completamente de la torre.


—¡Nada! Nada, ya bájate…—comentaron los paramédicos del 066, policías y bomberos.


—¡Es que se me atoró mi bota…!—dijo cuando intentó bajarse de un solo brinco.


Ya cuando estuvo en el piso miembros de la policía municipal lo aseguraron mientras se le intentó entrevistar. Entre sus motivos explicó que se había subido a la torre “por protesta” debido a que no lo quisieron atender cuando quiso regularizar el predio que tiene en la colonia Unión Antorchista, trámite que le urgía para poder venderlo pues recién había perdido su empleo como ayudante de herrero.


Plutarco explicó además que tras el enojo porque no quisieron arreglar la situación de su predio ante el ayuntamiento —ubicado en la manzana nueve, lote uno de la calle Ignacio Zaragoza— se había tomado unas cervezas. Tres caguamas, según explicó ante el juzgado calificador ubicado en la colonia La Popular.


A través de la Policía Municipal se informó que ya a las siete y media de la noche, momento en que fue presentado ante las autoridades, presentaba aún un segundo grado de intoxicación etílica por lo que el juez calificador definirá su situación legal por escandalizar y alterar orden público.

 

 


 
 
Todos los Columnistas