Desde hace meses ya había claros indicios y filtraciones de esta designación.
Cualquier lector acucioso puede buscar el Google la columna intitulada “Banck al Charlie Hall, el futurismo de RMV”. La publicamos hace cinco meses, concretamente el jueves primero de octubre de 2015. Esta es la liga:
El gobernador Moreno Valle tiene esa fascinación obsesiva por imponer su férreo control en todas las acciones que realiza, y por supuesto, buscar la figura para conducir la administración pública municipal no es la excepción. El mandatario vuelve a ejercer su preeminencia, de manera tajante, determinante, drástica y aunque la tormenta se desata en el vaso del círculo rojo, lo cierto es que de ahí no va a pasar.
Estas son algunas lecturas sobre la designación de Luis Banck Serrato en la Presidencia municipal interina que habrá de ocupar durante dos años con ocho meses.
Primero. El oficio de la eficiencia. Propios y extraños lo reconocen. Aún los “Rafafóbicos”, aquellos enardecidos y frenéticos enemigos del morenovallismo saben que Banck es el alfil más eficiente y pulcro de la cofradía que gobierna Puebla.
Prudente, mesurado y sensato, Luis es el operador centrado del morenovallismo, completamente alejado de los arrebatos y exabruptos, es el ejemplo vivo de la compostura. Su presencia llevará aliados, alianzas y amarres al Charlie Hall, porque esa es su naturaleza y esencia conciliadora.
Segundo. La eficiencia administrativa. En este terreno Banck tiene una reconocida trayectoria, desde los tiempos del melquiadismo donde la Secretaría de la colonia Azcárate se separó en dos dependencias Finanzas y Administración, por un lado, y Desarrollo Social por el otro. En esos años, Banck ya era reconocido como uno de los administradores más eficientes del gobierno estatal.
Esa habilidad para manejar los grandes números y cifras de la administración pública ha llevado a Banck por los más tortuosos escenarios y siempre ha salido bien librado. Nadie puede acusarlo de enriquecimiento, de hacer negocios turbios, de recibir moches o de fabricar razones sociales utilizando los nombres de mujeres campesinas.
Banck es un funcionario honesto y escrupuloso, y así debe ser considerado hasta que no existan evidencias en su contra.
Tercero. La lealtad a Moreno Valle. Esta faceta fue ampliamente valorada por el matrimonio que ocupa Casa Puebla; tanto Martha Erika como Rafael consideran que estas cualidades, la eficiencia, la pulcritud y la honestidad son parte de una faceta aun superior que es la lealtad.
Luis seguirá en el Charlie Hall cuando Moreno Valle haya dejado Casa Puebla. Pero el gobernador sabe que si de alguien puede esperar una inamovible lealtad, es precisamente de Banck Serrato.
Por eso se dio esta medida impetuosa, drástica, tajante, porque Moreno Valle prefiere tolerar el fuego político y mediático durante tres semanas, sabedor de que tendrá a un aliado leal en una posición estratégica.
Sí, sin duda hoy la tormenta se desborda en el vaso del círculo rojo, pero es el costo de obtener una plena lealtad a largo plazo. Porque al fin y al cabo el mayor anhelo de cualquier político que deja el poder estriba en no ser apuñalado por la espalda.
Rafael sabe que con Luis no pasará eso.
Como siempre, quedo a sus órdenes en cupula99@yahoo.com, sin mx.
