Atlixco, Pue.- Samuel Contreras, Investigador del Centro Universitario para la prevención de desastres de la Universidad Autónoma de Puebla insiste en que construir en los parajes de Santa Rita y parte de Axocopan, es “acercar a la población al peligro”, ya que la actual administración quiere construir la central de abasto en este lugar, proyecto que se ha venido posponiendo desde hace 4 administraciones.

Entrevistado durante la conferencia “la región Izta-Popo y el peligro volcánico” el investigador mencionó que desde hace varias administraciones este proyecto se solicitó que fuera detenido por el peligro que representa la cercanía del coloso a la zona, pues habría mucha gente expuesta en caso de una erupción volcánica.

“Ese proyecto tiene ya varios años, de hecho alguna vez nosotros lo detuvimos, platicamos en el tiempo de hace unos tres trienios más o menos, hablamos con el presidente, y le dijimos que eso no era correcto, que era acercar a la gente al peligro, no era correcto moverse, creo que la cambiaron de lugar, tengo la generalidad de todo el volcán, habría que hacer una investigación muy específica”.

También dijo que el tema del gasoducto Morelos fue una situación que recomendaron no instalar por estos municipios para evitar lo más que se pueda de accidentes, sin embargo se instaló y pasa en zonas muy cercanas al volcán.

En 4 años puebla capital, Atlixco y San Martin Texmelucan serán municipios de los más poblados y habrá un problema de concentración.

“Va a ser rebasado, hay una especie de importación de personas, el gran negocio de las constructoras es vender los paraísos verdes y hasta ponen nombres”.

Serán las autoridades quienes, dijo, deberían respetar la ley y evitar lo más posible poblar lugares cercanos al volcán.

“En este caso le corresponde a las autoridades, es respetar la ley, el ordenamiento ecológico es un documento vigente donde dice que se debe desmotivar el crecimiento urbano hacia la zona del volcán”.

El riesgo que tiene ahora Atlixco es el de cambiar los usos de suelo para permitir seguir construyendo sin importar que se terminan las reservas ecológicas o que corran peligro por la cercanía con el volcán.