La depresión es una enfermedad que se agudiza por las fiestas decembrinas, los internos del cereso la sufren y muchos intentan quitarse la vida ante la tristeza y el encierro, por ello en el Centro de Reinserción Social de Atlixco están trabajando para evitar el suicidio.
“Afortunadamente para el día de hoy, a la fecha no se ha registrado ningún interno que presente esta sintomatología, sin embargo estamos pendientes por si se llegara a dar el caso, pues tenemos el área de psicóloga, trabajo social, el ares de criminología que inmediatamente darían la terapia correspondiente” comentó Humberto de luz Bolaños Director del Cereso de Atlixco.
Se trabaja en coordinación con pláticas, terapias grupales, elaboración de piñatas, esferas y una pastorela que están organizando para sus familiares.
“Se pretende que se mantengan ocupados con el trabajo, por ejemplo las piñatas que ahorita es la temporada en que ellos aprovechan al máximo por que obtienen un recurso económico que les ayuda al sustento de sus familias, también continúan con los trabajos de carpintería, el área escolar también se mantiene activa”.
La ausencia de los familiares y el olvido provoca en los internos fuertes estados de depresión.
“Tenemos ya detectados a un grupo de 10 internos que por la lejanía de sus familiares que radican en otros estados, pues carecen de la visita, o algunos que definitivamente no cuentan con sus familiares, pero conjuntamente con instituciones educativas van a venir para ofrecer un concierto, alguna despensa y regalar libros de motivación personal”.
Si desean apoyar a los internos del cereso, pueden hacerlo adquiriendo sus productos, desde esferas, bufandas, bolsas o carteras hasta las tradicionales piñatas y cuadros de repujado en lámina. El mantenerse ocupados es una motivación para continuar viviendo.