Al año, el gobierno municipal de Tehuacán destina cerca de 300 mil pesos anuales a la manutención del Museo de Mineralogía, mientras que los ciudadanos le muestran poco interés al recinto que apenas logra captar alrededor de mil visitantes al año y en caso de ser buen tiempo llega a recibir hasta 1700 personas, la mayor parte de ellos extranjeros.
Bernardo Pozos Gutiérrez, regidor de cultura de Tehuacán puntualizó que es urgente replantear y darle un giro más llamativo al museo para aprovecharlo y atraer visitantes que a pesar de que el costo de acceso es de 10 pesos para adultos y 5 pesos para niños, la gente no aprecia el valor cultural que representa este espacio y sólo se registran 150 visitas al mes.
Tan sólo del pago del seguro de las piezas que se tienen en el museo se destinan 190 mil pesos anuales, los demás recursos se reparten entre el pago a los empleados y el mantenimiento del espacio.
En las vacaciones de Semana Santa “el Museo de Mineralogía fue visitado por solo 170 personas, la mayoría fueron extranjeros porque a la gente de Tehuacán no le interesa conocer el lugar que es una maravilla”, mencionó Pozos Gutiérrez.
El director de Cultura indicó que pese a los recortes presupuestales y la austeridad de la administración de la alcaldesa Ernestina Fernández Méndez, no se pretende cerrar el museo pero insistió en que urge replantearlo.
Comentó que dicho replanteamiento estará encaminado a volver al museo “divertido, interactivo e interesante para cualquier persona que sepa y no sepa de minerales”.
Para lograr la modernización del museo buscarán la forma de gestionar asesoría y apoyo económico de dependencias federales y estatales como las secretarías de Turismo y de Cultura, así como del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) e incluso de la iniciativa privada.
También le plantearán al Instituto Nacional de Antropología e Historia la posibilidad de trasladar el museo a las afueras de la zona Arqueológica La Mesa, que se abrirá próximamente conservando las medidas de seguridad que el Ayuntamiento le da a las piezas minerales que tiene en comodato.
Las piezas del Museo de Mineralogía son propiedad de la familia Romero Sánchez, pero fueron dadas en comodato al Ayuntamiento de Tehuacán en julio de 1998.
El museo cuenta con dos pequeñas salas de exhibición –insuficientes- ya que la colección de minerales de todo el mundo es aproximadamente de 10 mil piezas, de las cuales se exhibe sólo una parte.