Wednesday, 20 de August de 2025

Miércoles, 18 Mayo 2016 03:07

Tras la detención del Príncipe del Huachicol, al rojo vivo el Triángulo Rojo

Al menos tres balaceras se han registrado en los municipios claves de la lucha contra los chupaductos. Casi a la par de la detención, tuvo lugar una confrontación entre chupaductos y personal del Ejército Mexicano. La persecución se realizó sobre la Carretera estatal Huixcolotla-Acatzingo

  • Alberto Melchor / @AlbertoMelchorM


Al menos tres balaceras contra policías y el robo de una patrulla han encendido los “focos rojos” en los municipios que conforman el Triángulo Rojo, tras la detención de “El Príncipe del Huachicol”, uno de los presuntos cabecillas de la red de chupaductos que opera el robo de combustible en el estado, actividad que está en constante disputa tras la destitución de Facundo Rosas Rosas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).


Aunado a estos hechos, la incapacidad de las policías locales para apoyar a los cuerpos de seguridad federales o coordinar por sí mismas operativos básicos contra la delincuencia, han desencadenado violentos enfrentamientos como el que recientemente se originó en Quecholac, donde un policía federal resultó lesionado y un presunto asaltante murió durante el fuego cruzado de una persecución.


Balaceras tras la caída de El Príncipe


La madrugada del pasado 12 de mayo, elementos de la policía estatal ubicaron y detuvieron a un sujeto identificado como Javier R., mejor conocido como “El Príncipe del Huachicol”. Posterior a su detención, se comenzaron a registrar hechos violentos entre los chupaductos y los cuerpos de seguridad de los diferentes órdenes de gobierno.


Casi a la par de la detención, tuvo lugar una confrontación entre chupaductos y personal del Ejército Mexicano. La persecución que se realizó sobre la Carretera estatal Huixcolotla-Acatzingo requirió apoyo de diversas corporaciones de seguridad, entre ellas la unidad 104 de seguridad pública de Huixcolotla.


Cuando finalmente lograron darles alcance, los chupaductos recibieron a balazos a los policías y militares, momento en el que los delincuentes aprovecharon para amarrar la unidad oficial a la parte trasera de una de sus camionetas para remolcarla y llevársela de ahí , misma que luego sería ubicada en calles del Barrio El Calvario.


Dos días después de estos hechos, el sábado 14 de mayo se realizó un segundo evento armado, esta vez entre chupaductos y personal de Seguridad Física de Pemex en el municipio de San Martín Texmelucan, donde los ladrones de combustible evitaron su detención con balazos al aire.


Aunque no se reportaron heridos ni detenidos, finalmente las autoridades lograron asegurar una pipa son combustible presuntamente robado en el camino entre San Cristóbal Tepatlaxco y Atotonilco, en el paraje conocido como Los Delfines, la cual fue trasladada a las instalaciones de la PGR.


La balacera más reciente tuvo lugar apenas la mañana de este martes, cuando policías auxiliares de Chachapa se enfrentaron contra un grupo de sujetos que los atacaron con escopetas, mientras eran sorprendidos tratando de realizar una toma clandestina en un terreno baldío cerca de un fraccionamiento “Destello I”.


Minutos después de las doce de la noche, una llamada telefónica alertó a los cuerpos de seguridad de la presencia de 7 u 8 sujetos en un terreno baldío ubicado entre los fraccionamientos “Destello I” y “Destello II”, cerca de los ductos de Petróleos Mexicanos.


Al acudir a la zona, los uniformados fueron recibidos a escopetazos por los presuntos delincuentes de hidrocarburo quienes de inmediato huyeron con rumbo desconocido, dejando baleada la unidad en la que viajaban los uniformados, sin que se reportara ningún lesionado.


Delincuencia aprovecha crisis


Aunque en días recientes también se han presentado balaceras que no están precisamente vinculadas al robo de combustible, dejan en evidencia la debilidad de la fuerza pública en los municipios azotados por el crimen y las mafias, tal y como ocurrió este lunes cuando un agente de la Policía Federal resultó lesionado durante un enfrentamiento con ladrones de tractocamiones en la Carretera estatal Tecamachalco-Cañada, a la altura de Manjarrez en Quecholac.


En dicho enfrentamiento, además del policía con lesiones de bajo riesgo, se registró el deceso de Iván Bringas Carrera, de 27 años de edad e hijo de un ex policía de Quecholac, quien era parte del grupo de delincuentes que enfrentó a tiros a los elementos de la Policía federal.


Un hecho similar también tuvo lugar el pasado sábado en el municipio de Izúcar de Matamoros, donde un hombre identificado como Antonio M. inició una balacera cerca del predio conocido como cuatro caminos, resultando lesionado por disparo de arma de fuego e hiriendo a dos elementos de la Policía federal que intentaron detenerlo.