En cinco mil pesos tasó Rafael Portillo Abundis la vida de su novia Samai Márquez, a quien mandó a darle “un susto” para que dejara de insistirle sobre dejar a su esposa, por lo que decidió contratar para tal encomienda a una de sus amistades de los “bajos mundos”, quien la golpeó de forma brutal en el rostro para finalmente ejecutarla de un disparo en la cabeza.

Aunque Rafael Portillo es el único detenido y enfrenta los cargos por falsedad de declaraciones y en las próximas horas por el delito de feminicidio, la Fiscalía General del Estado (FGE) ya busca al autor material del asesinato de Samai y a otro grupo de jóvenes que presuntamente habrían actuado en complicidad, según revelaron las primeras pesquisas publicadas por Tribuna Comunicaciones.

Dado que aún no ha sido localizado el asesino de Samai, quien se presume es uno de sus amigos y con quien recientemente hizo negocios traspasándole una purificadora de agua que ahora luce desmontada, la FGE no ha podido determinar la mecánica de los hechos desde que desapareció la joven, hasta que fue hallada muerta en Valsequillo.

Le puso precio a la  vida de Samai y su bebé

A pesar de que tanto la víctima como su familia sabían que él había aceptado hacerse cargo del bebé, las declaraciones de Rafael Portillo señalan que en realidad él ya estaba desesperado de que la joven con dos meses de gestación le insistiera tanto sobre dejar a su esposa, promesa que supuestamente le habría hecho meses atrás sin concretarse.

Ante esto, contactó a una de sus amistades que estaría familiarizado con la comisión de delitos y a quien le ofreció 5 mil pesos a cambio de que le diera un escarmiento a la joven. “Yo sólo quería que le pusieran un susto”, detalló durante el interrogatorio a los ministeriales, la cual acusa fue obtenida bajo tortura.

Sin embargo, el sujeto contratado reunió un grupo de personas para que lo apoyaran a levantar a Samai el miércoles 17 de febrero, pero el supuesto escarmiento que debían darle culminó en la ejecución de la joven de 25 años, quien al momento de ser hallada en un paraje de Valsequillo, presentaba severos golpes y un disparo en la cabeza.

Según la necropsia, al momento del hallazgo a las 8 horas del sábado, Samai ya tenía más de 24 horas de haber sido asesinada, por lo que se presume que habría sido victimada desde la noche del jueves, mismo día en el que Rafael Portillo acudió a declarar por primera vez ante la Séptima Delegación del Ministerio Público.

Aunque ya se tiene identificado a uno de los autores materiales, la FGE desconoce el paradero de todos los sujetos que participaron del asesinato, por lo cual, continúan las indagatorias mientras que Rafael Portillo será procesado en las próximas horas por feminicidio y aborto.

Defensa de Rafael promueve amparo

La familia de Rafael Padilla Abundis buscó interponer un amparo que evite su ingreso al Cereso de San Miguel, por el delito de feminicidio, y en el cual acusan que la FGE lo detuvo desde la noche del viernes 19 de febrero y lo han mantenido incomunicado, además de que habría declarado su culpabilidad bajo tortura y presión psicológica.

Sin embargo, el recurso habría sido rechazado inicialmente por el Juzgado Tercero de Distrito en Materia Penal del Sexto Circuito, el cual se limitó a pedir una suspensión temporal a la orden de aprehensión, pues la FGE asegura tener los elementos suficientes contra Portillo Abundis para procesarlo por el delito de feminicidio.