El capo guerrerense Ángel Villalobos Arellano, quien fuera detenido durante un operativo en un famoso restaurante de Atlixco, el fin de semana pasado, peleaba la plaza en la Sierra de Guerrero y la distribución de la heroína con ayuda del cártel “Guerreros Unidos”, uno de los más sanguinarios que operan en la zona.

La detención generó expectativa, pues en un primer momento se guardó silencio respecto del caso, pero finalmente, se supo que además de su séquito de seguridad, Villalobos Arellano fue aprehendido por ser pieza fundamental del dispositivo de seguridad que existe en aquella entidad y en donde estaría relacionado con una masacre en la localidad de Polixtepec, en la Sierra de Guerrero en noviembre pasado.

De acuerdo con el programa “Punto de Partida” en Televisa, Ángel Villalobos junto con su hermano Efraín, conformaban su propia célula delictiva que se encargaba de operar los sembradíos de amapola en esa zona de Guerrero, sin embargo, se encontraban disputando la plaza con apoyo de “Guerreros Unidos”.

En el reportaje se profundizó que a la entrada del pueblo se encontraba la residencia de lujo de Ángel Villalobos, que un grupo de policías comunitarios la tomó y encontró en su interior automóviles y camionetas de lujo, así como instalaciones de seguridad con muros y puertas reforzadas, además de cristales blindados.

Asimismo, hallaron armamento como un rifle calibre 50, armas largas como “cuernos de chivo” y AR-15, además de cartuchos de diferentes calibres, con los que supuestamente libró varias de las sangrientas peleas por el territorio que derivaron en que esa comunidad comenzara a ser abandonada por los pobladores.

Tras la detención de Ángel, el Consejo Nacional de Seguridad informó que presuntamente encabezaba el grupo criminal “Los Villalobos” junto con su hermano Efraían, con quien estaría involucrado en el homicidio del dirigente de Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (Upoeg), ocurrido en noviembre del año pasado.

Luego de huir de Guerrero y asentarse en Atlixco, Puebla, fuerzas federales lo ubicaron el domingo pasado en el restaurante Las Espadas y desplegaron un operativo en el municipio de Atlixco en el que, sin realizar un solo disparo, se logró su captura junto con su personal de seguridad.

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