Luca Salvai, alcalde de Pinerolo, fue el encargado de legalizar el enlace entre las dos ex monjas de 44 años de edad. La fecha del matrimonio fue adelantada por miedo a los prejuicios que pudiera causar esta unión.
Isabel (nombre ficticio) es doctora en filosofía y se ha pasado la vida haciendo el bien en las misiones católicas del mundo.
La ceremonia civil la celebró el alcalde de Pinerolo, Luca Salvai, que pertenece al movimiento 5 Estrellas de Beppe Grillo, en gran alza entre la opinión pública como alternativa antisistema.
Al padre Barbero, el diario de Turín “La Stampa”, le preguntó: “¿Cómo nació su amor mutuo?”. “Lentamente, conociéndose, comprendiéndose, probando un sentimiento profundo. Será bello tenerlas aquí, en nuestra comunidad de diálogo y oración”, responde el cura en conflicto con las cumbres de la Iglesia. El padre Barbero se considera “un cura hasta la punta de los cabellos: hago el sacerdocio todo el día”.
Las dos mujeres son ex monjas para el Vaticano, tienen la misma edad, 44 años. Isabel viene de la América del Sur y con la unión con Federica podrá quedarse si problemas en Pinerolo.
El padre Barbero dice que “son dos personas bellas, con laureas universitarias importantes”. Tienen “una fe muy intensa y se conocieron tres años atrás: han reflexionado largamente y el camino fue atormentado”.
En 2016 con la unión de Isabel y Federica, suman veinte ceremonias religiosas para fieles del mismo sexo.
Isabel y Federica quieren que su sueño valeroso sea reservado, han pedido el anonimato.
“NO ES POR PUDOR SINO MIEDO A LOS PREJUICIOS”, DIJO FEDERICA A “LA STAMPA”. “NO NOS INTERESA LA CELEBRIDAD, QUEREMOS VIVIR SERENAMENTE NUESTRO AMOR Y ENCONTRAR UN NUEVO TRABAJO”.
Fuente: El Debate