Jenna Driscoll es una camarera australiana a la que le fueron hallados videos zoofilicos en su celular, cuando era investigada por tráfico de drogas. Ella tuvo relaciones sexuales con su pitbull para supuestamente “excitar a su pareja”.

El caso conmocionó a la opinión pública del país océanico. Por lo demás Jenna comentó –categóricamente "me arruinó la vida. Estoy muy arrepentida por lo que hice".

Su abogado defensor, James Godbolt, explicó que la vida de la joven que trabajaba como moza, pero vendía la drogas a por lo menos 15 clientes, fue una pesadilla. Tuvo una niñez disfuncional y la relación que mantuvo en los últimos seis años tampoco fue la apropiada.

En la sentencia, el juez consideró que lo ocurrido era una bestialidad, sin embargo, le dictó una orden de libertad condicional.

Con información de Terra.