La candidata Roxana Luna Porquillo continuó con sus shows de campaña en edificios públicos al colocar en el Centro Integral de Servicios (CIS) un monolito del Dios Tláloc como una manera de criticar la concesión de Agua de Puebla para Todos, que asegura sólo ha servido para beneficiar a sus dueños y no ha mejorado las condiciones del suministro para los poblanos, por lo que prometió cancelar la concesión en caso de ganar el próximo 5 de junio.

La abanderada perredista aseguró que antes de su evento, en la explanada del CIS se encontraba resguardada por varios elementos de Seguridad Pública y al ver que llegó con su equipo “se acercaron uniformados y una persona que se hizo pasar por el gerente del CIS, quien señaló que no podría realizarse el evento debido a que se carecía de la autorización correspondiente”. Sin embargo, el acto se pudo realizar.

La perredista recordó que en 2014, una reforma avalada por el PRI, PAN y el gobierno estatal, así como por el entonces alcalde y ahora candidato panista, Antonio Gali Fayad, permitió que Concesiones integrales SA de CV, una empresa privada, lucre y administre el agua de Puebla, lo cual, asegura la perredista, atenta contra los poblanos.

“Es incongruente que hoy en pleno proceso electoral se nos olvide que han vendido nuestros recursos naturales”, dijo la candidata.

Además, hizo hincapié que desde que comenzó a operar el otrora Soapap, ahora bajo el nombre de Agua de Puebla para Todos, no han reducido las tarifas de consumo y en algunos casos ha aumentado hasta 400 por ciento los cobros. “Esto se volvió un asunto de dinero y no de una demanda de los poblanos”, aseguró.

Finalmente, a manera de “recordatorio” el monolito construido de cartón se quedó en el centro de la explanada del edificio de la zona de Angelópolis.