Para permitir que la línea 1 de la RUTA sea concesionada a una empresa, los socios del Servicios Articulados de Puebla (SAPI),exigen al gobierno de Rafael Moreno Valle una indemnización superior a 400 millones de pesos.

El asesor financiero de los ex transportistas de la troncal Tlaxcalancingo-Chachapa, Roberto Camilo Vázquez Vázquez confirmó a CAMBIO que los concesionarios están dispuestos a negociar con el secretario de Infraestructura y Transportes, Diego Corona Cremean, quien hace un par de semanas reveló que el estado busca privatizar el servicio.

Aseguró que sus representados buscan un diálogo, aunque ya fueron convocados a una asamblea a través del Periódico Oficial del Estado a fin de modificar sus contratos y advirtió que de concesionar el servicio a un privado, el gobierno estaría cometiendo un fraude.

CISA se acerca para negociar

En una rueda de prensa previa, algunos de los implicados confirmaron que personal cercano a Jesús Padilla Zenteno –socio mayoritario de la empresa Corredores Insurgentes SA (CISA) – lo ha buscado para negociar la entrega de sus acciones.

Informaron que los interesados ofrecen 75 por ciento menos del valor real de las acciones a cada uno de los socios de la línea 1 de la RUTA, debido a que les darán sólo 25 mil pesos o la entrega de placas para administrar taxis, cuando cada una de sus operaciones se cotiza en un millón de pesos.

“No hay intención de los socios en vender sus acciones, mucho menos a un precio por debajo del millón de pesos que es lo que nos pagan en un inicio. Cada concesionario tiene hasta dos acciones, por lo tanto no aceptaremos una indemnización inferior a los 400 o 500 millones de pesos si el Gobierno decide revocarnos la concesión y entregarla a un particular”, condicionó.

Roberto Vázquez puntualizó que a dicha cantidad se adicionarían las ganancias generadas desde el arranque de operación de dicho sistema de transporte masivo, dado que sólo se les pagaron 6 mil pesos mensuales durante el primer cuatrimestre –todavía representados por Miguel Ángel Aceves- y a más de dos años de funcionamiento de este sistema no han percibido ganancias.

Detalló que en el Plan de Negocios del Corredor Chachapa-Tlaxcalancingo la expectativa de ingresos anuales por 279 millones de pesos, de los cuales, después de cubrir los gastos de operación del servicio se estimaba un remanente de 33 millones de pesos que se repartiría entre los 192 concesionarios pero no se cumplió con las proyecciones hechas antes del inicio de operaciones.

Ex funcionarios, responsables del fracaso de la Línea 1

El representante de SAPI, Juan Cervantes Hernández responsabilizó a las autoridades de la Secretaría de Transporte en Puebla del fracaso de la operación de la primera troncal, puesto que no vigilaron que se diera cumplimiento a las reglas de operación del sistema, a pesar de que en su momento los socios advirtieron que no había condiciones para iniciar con su funcionamiento.

“Desde un inicio no se nos entregaron las instalaciones completas a la SAPI y no dieron tiempo a ATT Maximus de acabar de instalar sus sistemas de cobro en las terminales de pago, estos fueron factores que provocaron que el servicio colapsara en el corto plazo”, dijo.

Explicó que para operar correctamente los concesionarios requerían patios de encierro para el resguardo de las unidades, talleres de mantenimiento mecánico, áreas de lavado, oficinas de administración y la instalación total del sistema de prepago; equipamiento e instalaciones suficientes como sucede con líneas como el Mexibus, Metrobus, Tuzobus, entre otros.

“Se los previmos pero no quisieron entender, decidieron arrancar la operación y ahí están las consecuencias. Los escritos demuestran que los transportistas no fuimos los incompetentes y hacen constar que les avisamos sobre las fallas para que se corrigieran pero no hubo respuesta de las autoridades en turno”, dijo al señalar directamente al ex subsecretario del Transporte, Carlos Zurita, y al ex director de Planeación y Desarrollo, Víctor Mata.

No obstante, Juan Cervantes recalcó que los socios insisten en recuperar la operación del servicio que en 2014 fue transferido a Carreteras de Cuota Puebla y que sea este organismo, a cargo de Mariana Navarrete les entregue la toma de nota según las sentencias de los juicios mercantiles y penales que han promovido.

40 % de unidades de la Ruta, fuera de servicio

Cervantes Hernández reprochó que desde hace dos años que Carreteras de Cuota Puebla opera la primera troncal del Metrobus no ha dado mantenimiento a las unidades alimentadoras dado que el 40 por ciento de un total de 119 equipos se encuentran en reparación y solo opera con el 60 por ciento de su capacidad.

Además, alertó que algunas unidades están brindando el servicio en la Línea 2 lo que aumenta su desgaste y reducir su tiempo de vida.

El representante de SAPI urgió a dar el mantenimiento mecánico a las unidades para evitar que se incremente el número de troncales que dejen de brindar el servicio de transporte a los usuarios dado que el Plan de Negocios estipula que los autobuses se repondrán cada 10 años de funcionamiento.