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Jueves, 10 Noviembre 2016 02:34

Trump pone a temblar a la VW: peligran 300 mil vehículos

También corren peligro más de 12 mil empleos directos de ambas industrias en Puebla. El economista Guillermo Barba observó que si bien las modificaciones al TLC impactarían en las exportaciones que Volkswagen y Audi de México, también representan una oportunidad para ampliar sus mercados

  • Karina Fernández / @FdezKarina


El triunfo de Donald Trump en la pasada elección presidencial pone en riesgo la exportación a Estados Unidos de por lo menos 300 mil vehículos que serán ensamblados por Volkswagen y Audi de México en 2017, cuyas armadoras están asentadas en territorio poblano, además de los más de 12 mil empleos directos que estas industrias generan en el estado de Puebla, si el republicano concreta su propuesta de imponer un arancel del 35 por ciento para el ingreso de automóviles fabricados en México.


De acuerdo con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), el 70 por ciento de la producción para exportación de Volkswagen de México se envía a Estados Unidos: de 277 mil 629 unidades fabricadas entre enero y octubre de este año se han enviado 195 mil 577, y en 2015 se enviaron 275 mil 727 de 393 mil 263 vehículos.


En tanto, la planta de Audi de México en San José Chiapa que proyecta la fabricación anual de 150 mil unidades del modelo Q5, plantea el envío del 30 por ciento de su producción al mercado estadounidense, alrededor de 45 mil automotores anuales que adicionales a los 275 mil complicaría el comercio de 320 mil 727 automóviles de fabricantes del Grupo Volkswagen instalados en Puebla.


Una baja en las exportaciones de estos fabricantes implicaría una reducción en sus niveles de producción y con ello un posible recorte de personal como ocurrió con el Dieselgate, alertó Fernando Vera Sánchez, catedrático del Departamento de Administración Economía y Finanzas del Tecnológico de Monterrey.


Por otro lado, el economista Guillermo Barba observó que si bien las modificaciones al Tratado de Libre Comercio (TLC) propuestas en campaña por el republicano impactarían en las exportaciones que Volkswagen y Audi de México realicen a partir de 2017 al país vecino, también representan una oportunidad para que los fabricantes amplíen sus mercados y no sean dependientes de un solo país.


Aranceles frenarían exportaciones y empleos generados por VWMX


La intención del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump de aplicar un arancel para la importación de vehículos fabricados en México impactaría las exportaciones que Audi y Volkswagen de México, ya que el 30 y 70 por ciento de su producción está destinada a mercado. Además, pondría en riesgo la vigencia de los más de 12 mil empleos que generan.


En entrevista con CAMBIO, Vera Sánchez recordó que con el Dieselgate, Estados Unidos limitó el ingreso de automóviles nuevos en los que se detectó alteraciones a las emisiones contaminantes de sus modelos, entre ellos las versiones diésel del Beetle, Golf y Nuevo Jetta fabricados en Cuautlancingo.


Esto derivó en un desplome del 25 por ciento de sus exportaciones y recorte de personal, ya que a principios de este año no se renovaron 600 contratos a los trabajadores eventuales de la planta, y hasta apenas hace un mes se recontrataron a 400 exempleados después que la armadora se recuperó del escándalo.


En este sentido, el académico advirtió que la propuesta de imponer un arancel del 35 por ciento para el ingreso de mercancía mexicana a Estados Unidos generaría un conflicto similar para que Volkswagen y Audi comercialicen sus unidades, que repercutiría además en un incremento del 60 por ciento en el costo de los vehículos.


“La restricción para la importación de autos en Estados Unidos incrementaría su costo en un 60 por ciento y eso a los americanos no les va a gustar (…) El consumidor no creo que esté dispuesto a pagar un sobrecosto lo que generará un problema en el consumo interno del país”, advirtió.


Por separado, Anselmo Chávez Capo, licenciado en Administración Financiera y Bursátil de la UPAEP coincidió en que las consecuencias económicas serían tanto para México como para Estados Unidos, por lo cual dijo que el próximo inquilino de la Casa Blanca tendrá que analizar la viabilidad de modificar el TLC para imponer un arancel que obligue a su propia comunidad a pagar más por los mismos productos.


Comentó que si el republicano mantuviera firme su propuesta, los cambios a las reglas para la comercialización entre México y Estados Unidos podrían observarse a partir del segundo semestre del próximo año, ya que la negociación y aprobación de las nuevas reglas de comercio no entrarían en vigor de manera inmediata.


Diversificar mercados frente a obstáculos de comercio con EU


A decir de Guillermo Barba, la limitación para la comercialización de mercancía con Estados Unidos es una oportunidad para que México amplíe sus mercados hacia otros horizontes y su economía no dependa únicamente de la comercialización de productos y servicios con el vecino del norte.


“El 80 por ciento de la mercancía y de los automóviles que exporta México se va para Estados Unidos, no podemos ser tan dependientes de un solo cliente porque el hecho de vender menos implicaría menos crecimiento interno y con ello una inminente recesión económica, pero si contraatacamos abriendo la economía de par en par tendremos un futuro próspero”, dijo en entrevista con este medio.


Consideró que México está obligado a “contraatacar” la política antiinmigrante de Trump, y señaló que países asiáticos como China con mercados de oportunidad para el país y para las transnacionales como Volkswagen a donde –según la AMIA- solo envía el 3 por ciento de su producción para la exportación.


“Las armadoras tienen que hacerlo. Pueden usar a México como trampolín para ajustar sus planes de negocio. No es sencillo pero tienen que seguir produciendo, mirar hacia otros horizontes como puede ser Canadá y Asia e intentar ampliar su plataforma de exportación”, expresó.


En el panorama general, Guillermo Barba convocó al Gobierno Federal a tomar previsiones ante una posible inestabilidad económica no sólo diversificando sus mercados, sino además reduciendo el gasto corriente a partir del próximo año cuando comenzará la administración de Donald Trump.