Friday, 19 de April de 2024

Viernes, 06 Enero 2017 03:53

Pemex pierde 7 millones de pesos diarios por chupaductos (VIDEO)

Los municipios en donde más roban combustible son los ubicados en el Triángulo Rojo. Por lo que a partir de este jueves se reforzó la vigilancia en la zona con equipo israelí, con lo que buscan terminar con esta práctica ilícita que daña a Pemex.

  • Elvia Cruz / @cruz_elvia


Al día, las bandas de chupaductos en Puebla ‘ordeñan’ a los ductos de Pemex 15 mil barriles de gasolina (2 millones 382 mil litros), principalmente en municipios que conforman la zona conocida como Triángulo Rojo, cuyo quebranto alcanza cerca de siete millones de pesos, de acuerdo con información oficial.


Y como una forma de combatir las tomas clandestinas en la entidad, que a nivel nacional ocupa el primer lugar en este delito, a partir de este jueves se reforzó la vigilancia en la zona con equipo israelí.


Personal de Seguridad Física de Pemex y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ofrecieron un recorrido a un grupo de medios de comunicación para explicar la forma en la que operarán los nuevos equipos, cuya base de operación fue ubicada en la barranca El Águila, en San Jerónimo Ocotitlán, perteneciente a Tepeaca; punto rojo por la disputa que mantienen grupos del crimen organizado que buscan controlar la venta del hidrocarburo.


Pemex pierde hasta 7 millones de pesos al día en Puebla


Tan solo en los 100 kilómetros de poliducto Minatitlán-México que cruzan en la entidad (el tramo Maltrata-Resurrección), los ladrones de combustible causan un quebranto al país por 7 millones de pesos diarios, 210 millones de pesos al mes, cuya disputa ha generado balaceras y explosiones, principalmente en Palmar de Bravo, Tepeaca, Quecholac, Acatzingo y Acajete.


Según la explicación que dio el personal de Petróleos Mexicanos, en esta zona hay un total de seis centros de vigilancia con al menos 30 elementos, entre militares y personal de Seguridad Física con facultad para atender 30 kilómetros de derecho de vía.


Y en los 600 kilómetros que abarca en total el poliducto (de Minatitlán a México), existen 13 bases de operación en la que participan más de 500 elementos en la vigilancia.


Uno de los tramos más conflictivos que registra Pemex es en la zona del Triángulo Rojo en donde en menos de 24 horas, reciben más de 15 reportes de tomas clandestinas.


CAMBIO constató que el personal no se da abasto para vigilar o sellar el ducto, además que los también llamados huachicoleros tienen la capacidad para ‘ordeñar’ hasta mil litros en cinco minutos. El poliducto tiene perforaciones en cada 30 centímetros.


Puebla ocupa el primer lugar a nivel nacional en registrar un mayor número de tomas clandestinas. Tan solo de enero a octubre del 2016, sumaron mil 145, un 45 por ciento más de los 785 que se registraron durante todo el 2015.


El sistema israelí que vigila los ductos


El equipo traído de Israel para vigilar el poliducto que cruza en Puebla opera con tres tipos de sistema: el primero es conocido como Stalker y consiste en una cámara con un radar de 24 kilómetros, cuyo objetivo es ubicar a posibles ladrones de combustible.


De acuerdo con la explicación que se brindó, operará las 24 horas del día y será manejado por dos personas. Las funciones de los que se encarguen del monitoreo es ubicar y reportar personas que extraen la gasolina a fin de que el personal se traslade para inhibir el robo o sellar el tramo.


Otro sistema identificado como “espejo” consiste en reportar en tiempo real lo que ocurra al C5 de Pemex. Está diseñado para mandar de inmediato las coordenadas de donde se registren problemas a lo largo del derecho de vía.


El tercero es el sistema ADN que tiene monitoreado cada uno de los vehículos que ocupa el personal designado en la vigilancia y que también está conectado al C5. Cuando hay una alerta, realizan la supervisión para verificar que las unidades realmente se están moviendo al punto de las tomas clandestinas y rastrea el personal que las ocupan.


En este sistema de operación, Pemex identifica los camiones en rojo cuando están inactivos y en verde cuando están en movimiento.


Los capitanes que dieron las entrevistas, pidieron no ser identificados por razones de seguridad, debido a que en 2016, recibieron más de 10 amenazas y extorsiones para convertirse en cómplices de las mafias de chupaductos, quienes son los principales beneficiarios del gasolinazo que se concretó en enero, ya que de manera descarada comercializan el producto robado en mercado y en autopistas.