A pesar de contar con un presupuesto de egresos superior a los 50 millones de pesos, el Organismo Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Tehuacán (Oosapat) enfrenta una situación financiera. Operando en números rojos, así lo señaló Juan José Hernández López, representante del Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM), datos obtenidos a través de solicitudes de transparencia.
La situación ha generado cuestionamientos sobre la administración de los recursos y la eficiencia operativa del Organismo, ya que no se ha explicado claramente por qué se ha llegado a este estado financiero adverso.
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La directora del Oosapat, Angélica Gálvez, solicitó recientemente un subsidio por más de 16 millones de pesos para el pago de deudas.
Incluidas las que mantiene con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), además, posteriormente se solicitó otro subsidio de más de 5 millones de pesos, ambos fueron rechazados por el Cabildo.
Ante este panorama, Hernández López, reconoció que lo ideal sería que el alcalde electo, Alejandro Barroso, asuma la responsabilidad de revisar minuciosamente las finanzas no solo del Oosapat, sino también del Organismo Operador del Servicio de Limpia de Tehuacán (Ooselite).
Por lo que, sugirió que la nueva administración gestione una auditoría por parte de la Auditoría Superior del Estado para esclarecer la situación financiera y tomar medidas correctivas.
De modo que la transparencia y la correcta administración de los recursos públicos serán fundamentales para recuperar la confianza de la ciudadanía