Alejandro Barroso, presidente electo de Tehuacán, reconoció las dificultades que ha causado el traslado de basura al relleno sanitario de Ciudad Serdán, ubicado a casi dos horas del municipio.
Este traslado ha provocado retrasos en la recolección de residuos, una situación que podría llevar a la terminación del convenio con el municipio de Chalchicomula de Sesma.
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Barroso destacó que, aunque Tehuacán no cuenta con un relleno sanitario propio para residuos sólidos, su administración tiene casi resuelto el problema de la basura, por lo que llamó a la ciudadanía a confiar en el nuevo proyecto que está por implementarse. Recordó que asumirá el cargo el próximo martes, 15 de octubre.
A pesar de estos avances, el presidente electo mencionó que el presupuesto federal para el municipio se recibirá hasta noviembre, lo que dificulta la planificación financiera inmediata.
Además, señaló que aún no conoce los detalles de la partida presupuestal, ya que esta será entregada al cierre de la actual administración.
Por otra parte, Barroso también abordó la crítica situación financiera del Organismo Operador de Agua Potable y Alcantarillado de Tehuacán (Oosapat), que arrastra una deuda de 52 millones de pesos.
Anunció que buscará aprobar un subsidio de entre 5 y 6 millones de pesos para aliviar esta carga financiera.
El presidente electo adelantó que, una vez en funciones, revisará minuciosamente las finanzas tanto de Oosapat como de Ooselite, otro organismo municipal. No obstante, reconoció que la deuda actual es un problema heredado de administraciones anteriores, por lo que Barroso prometió priorizar la estabilidad financiera del municipio y resolver los problemas pendientes que afectan tanto a la recolección de residuos como al servicio de agua potable en Tehuacán.
