Crescencio N. ahorcó a su esposa frente a su hija en San Jerónimo Coyula, de Atlixco, y tras siete años del crimen, este 12 de noviembre de 2024, un tribunal le dictó sentencia condenatoria por el delito de feminicidio en perjuicio de Bárbara Isabel, de apenas 22 años.
El caso se remonta al 24 de mayo de 2017, cuando Bárbara Isabel fue privada de la vida por asfixia mecánica por estrangulamiento en el domicilio que compartía con su agresor y concubino, Crescencio N. Según las investigaciones, el hombre utilizó un lazo para cometer el crimen tras una discusión. Todo ocurrió en el patio de la vivienda, donde el feminicida enterró el cuerpo de su víctima.
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En un acto que mostró frialdad y cinismo, Crescencio N. denunció días después la desaparición de su pareja, intentando desviar las sospechas. Sin embargo, en una confrontación posterior con su suegra, confesó el feminicidio al señalar un montículo de tierra en el patio de la casa de Atlixco y admitir que allí había enterrado a Bárbara Isabel.
El 28 de mayo de 2017, agentes investigadores de la Fiscalía General del Estado (FGE) llevaron a cabo las diligencias de levantamiento del cadáver tras el hallazgo del cuerpo. Apenas dos días después, el 30 de mayo, la FGE obtuvo una orden de aprehensión contra el agresor.
La investigación reveló que la hija de la pareja fue testigo del asesinato, un hecho que agravó el impacto del feminicidio en la familia y en la comunidad.
Finalmente, después de años de proceso judicial, este 12 de noviembre se emitió la sentencia condenatoria contra Crescencio N., quien enfrentará las consecuencias legales por este acto atroz.
