Un par de elementos de seguridad de la empresa privada VIMA le negó a empujones y manoteos el acceso a una niña de escasos recursos que quería vender dulces dentro del restaurante Sonora Grill de Solesta.
#AHORA || 🔴 ¡Que se metan con uno de su tamaño! Así la seguridad privada de la empresa #VIMA, que demostró su prepotencia con una menor de edad de escasos recursos que quería vender sus productos en #SonoraGrill de #PlazaSolesta; los uniformados no tuvieron tacto para evitar su… pic.twitter.com/xHDG9GYCAa
— Faro Digital Noticias (@farodigitalpue) February 26, 2024
Los hechos quedaron registrados a través de un audiovisual compartido por el portal Faro Digital, donde señalan que los uniformados no tuvieron tacto para evitar su entrada y prefirieron lastimarla dos veces de la mano.
En las imágenes se puede ver como la niña llevaba en sus manos un paquete de mazapanes y unas carpetas o servilletas tejidas a mano, con la intención de obtener unas monedas.
Sin embargo, ellos con fuerza y prepotencia impiden a empujones que la niña tan siquiera llegue a la recepción, en algunos momentos comienzan los manoteos y los dulces al igual que un radio de policía caen al suelo.
Tras varios segundos, la menor comienza a llorar sentada sobre el sillón de la recepción posterior a recoger sus dulces del piso.
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Franeleros de la 28 de Octubre dan brutal golpiza a pollero frente al Auditorio Metropolitano
Un repartidor de comida identificado como Marco, fue víctima de una tremenda golpiza que le propinó un grupo de “viene-viene”, que se encuentra en el Auditorio Metropolitano.
El hombre fue agredido solo porque dejó su motocicleta unos segundos estacionada para entregar el pedido de un pollo, incluso hasta le robaron sus pertenencias.
De acuerdo con el noticiero de Juan Carlos Valerio, se expuso que la víctima se encuentra con lesiones bastante graves, pues por la golpiza, le rompieron tres costillas y presentó diversas lesiones en su rostro.
Este hecho ocurrió el fin de semana cuando Marco llegó a dicho auditorio para entregar un pedido de un pollo que le solicitaron a través de una plataforma de comida.
El hombre dejó su motocicleta estacionada en la zona que rodea el Auditorio Metropolitano para buscar entregar el pedido, sin embargo, fue ahí cuando un grupo de franeleros, presuntamente integrantes de la 28 de Octubre, le exigieron que se quitara y se fuera a otro lado.