Un grupo de vecinos de la población de San Jerónimo Ocotitlán halló huesos, algunos de ellos con restos cárnicos que posiblemente fueron devorados por los animales del lugar. También se encontró ropa, por lo que se presume que se trataba de un hombre. Sin embargo, se esperan los resultados de los estudios del peritaje para determinar el sexo y la identidad de la persona.
En el lugar se encontraba ropa de hombre y una credencial que indicaba que era originario de Guatemala. No obstante, se informó que solo quedaban huesos y algunos de ellos todavía tenían restos cárnicos, según mencionaron los vecinos de la comunidad de San Jerónimo Ocotitlán, en el municipio de Acajete.
Los policías de Acajete acudieron al lugar indicado en el reporte para iniciar las indagatorias correspondientes y dieron aviso a los agentes de investigación de la Fiscalía General del Estado del distrito judicial de Tepeaca. Estos iniciaron el levantamiento de los restos humanos durante la tarde-noche del martes 28 y continuaron durante la mañana del miércoles 29 de mayo.
Dentro de una zanja hallaron un pie y ropa de hombre. Trascendió que había un cráneo en un campo de cultivo y, en el interior de una zanja, un pie y ropa de hombre, mientras que el resto de los huesos humanos se encontraba un poco más lejos.
Fuentes oficiales informaron que los agentes peritos de la Fiscalía General del Estado ordenaron el levantamiento del cadáver y posteriormente lo trasladaron al anfiteatro del distrito judicial de Tepeaca. Se encontró una credencial de un hombre que acreditaba que era originario de Guatemala, lo que sugiere que los restos humanos podrían pertenecer a una persona indocumentada que transitaba por México y Puebla en su búsqueda del sueño americano.
