XALAPA, VER.- Tras una búsqueda de casi dos meses, Emma Lucia Bandala Herrera y Santiago Rodríguez Navarro fueron hallados muertos. La pareja estaba desaparecida desde el lunes 8 de abril cuando salieron de su casa en Poza Rica, al norte de Veracruz, a vender una camioneta; lo que significaría un alivio en los gastos familiares, se convirtió en una tragedia para sus hijos de 21 y 19 años, y un menor de edad.
Los cuerpos fueron hallados tras la orden de cateo en un inmueble asegurado en la localidad de Palma Sola, perteneciente al municipio de Coatzintla. La Fiscalía General del Estado (FGE) detalló mediante el boletín del 16 mayo que los trabajos tuvieron como objetivo principal la posible localización de fosas clandestinas, y en caso de resultar puntos positivos con restos humanos, realizar las labores correspondientes de exhumación.
“El equipo forense tiene como tarea principal, la localización de puntos positivos que pudieran indicar la existencia de fosas clandestinas en el inmueble mencionado y, de ser necesario, llevar a cabo labores de exhumación”.
El municipio de Coatzintla está ubicado a apenas 6 kilómetros de Poza Rica, lo que se traduciría en un viaje en auto de entre 10 y 15 minutos. En el mismo sitio está localizado el Cuartel General Séptimo Batallón de Infantería.
¿Qué pasó?
Rebecca Rodríguez Bandala, hija mayor de la familia, comenzó a difundir el caso de la desaparición de sus padres al otro día que se reportó que no volvieron a casa. Con videos en redes sociales y entrevistas a medios nacionales, la joven de 21 años exigió a las autoridades de Veracruz celeridad en las investigaciones.
Para la pareja, la venta de aquella camioneta significaba un respiro a su bolsillo para sostener los gastos en casa. Rebecca detalló en entrevista para Mafian TV que ella estudia fuera de Poza Rica, y sus padres “se parten el lomo” para darle “lo mejor siempre”. Describió a su familia como “normal y corriente”, como muchas de las que viven en Veracruz.
