La noche del lunes, una fiesta local en la comunidad de San Juan Tejupa, perteneciente al municipio de Atzitzihuacan, se convirtió en escenario de caos. Vecinos reportaron desmanes en las inmediaciones del evento, lo que provocó la intervención de la policía municipal.
Sin embargo, al intentar controlar la situación, los oficiales enfrentaron la resistencia de algunos asistentes, quienes obstaculizaron su labor, retuvieron a los agentes y a las patrullas.
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Lázaro Martínez, presidente auxiliar de la junta de Atzitzihuacan, se presentó en el lugar de la fiesta con la intención de mediar, pero las tensiones se agravaron cuando los habitantes utilizaron camionetas para bloquear el paso de los vehículos policiales, impidiendo que los agentes abandonaran el sitio.
Ante el riesgo creciente, se activaron protocolos de seguridad y se solicitó el apoyo de refuerzos policiales de municipios cercanos, así como de elementos del Ejército Mexicano.
Tras prolongadas negociaciones entre los mandos policiales y los habitantes inconformes, se alcanzó un acuerdo que permitió la liberación de los oficiales y la retirada de las patrullas. La calma volvió a la comunidad luego del tenso enfrentamiento.
Las autoridades señalaron que investigarán lo sucedido para evitar que hechos similares se repitan y garantizar la seguridad en la región.