Más allá del resultado deportivo que coronó a Terence Crawford como el nuevo campeón indiscutido de peso supermediano, un gesto de gran deportividad acaparó los reflectores: el estadounidense devolvió los cinturones físicos a Saúl “Canelo” Álvarez minutos después de su victoria.
Terence Crawford gave Canelo his belts back 🤝 #CaneloCrawford pic.twitter.com/XYAvfyDj1F
— Championship Rounds (@ChampRDS) September 14, 2025
Esta acción, que ha sido ampliamente difundida, destaca la profunda admiración que existe entre ambos pugilistas.
Si bien la práctica de devolver los fajines al boxeador que llega como campeón no es inusual en el pugilismo, el acto de Crawford adquirió un simbolismo particular.
Con la derrota, Canelo perdió la titularidad de los cinturones del Consejo Mundial, de la Asociación Mundial, de la Federación Internacional y de la Organización Mundial de Boxeo; sin embargo, Crawford quiso que el tapatío se quedara con los objetos que acreditan su histórico reinado en la división.
Este gesto, considerado por muchos como un acto de humildad y respeto, enfatiza que la rivalidad se limita al cuadrilátero. Aunque el veredicto de los jueces fue contundente a favor de Crawford, el gesto post-pelea demostró que más allá del combate, lo que prevalece es la hermandad y el respeto entre dos de las más grandes figuras del boxeo actual.
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