El ciclista mexicano Isaac del Toro firmó una actuación memorable en la 108ª edición del Giro de Italia, al finalizar en la segunda posición general, solo por detrás del británico Simon Yates, quien se coronó campeón tras una sorprendente remontada en la última semana de competencia. El tercer lugar fue para el ecuatoriano Richard Carapaz.
Del Toro, de tan solo 21 años y miembro del equipo UAE Team Emirates, se consolidó como una de las grandes revelaciones de esta edición. Durante 10 etapas portó la maglia rosa, símbolo del líder general, mostrando un alto nivel competitivo y una notable madurez para su corta edad. Su consistencia lo mantuvo en la cima de la clasificación durante gran parte de la carrera, hasta que en la etapa de Le Finestre, una de las más exigentes, cedió el liderato frente a un inspirado Yates.
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A pesar de no conservar el primer puesto, Del Toro demostró estar a la altura de los grandes nombres del pelotón internacional. Su presencia en el podio confirma el auge del ciclismo latinoamericano, junto a figuras como Carapaz, también protagonista durante varias jornadas.
El desempeño del joven mexicano no solo es histórico por el resultado, sino también por el mensaje que deja: el futuro del ciclismo en el país está asegurado. Con esta actuación, Isaac del Toro se convierte en una promesa convertida en realidad, y en un nombre a seguir en las grandes vueltas por venir.