Audi México se queda sin sindicato único: el SITAUDI pierde el monopolio de la representación laboral tras el reconocimiento oficial del SAUTAM, un nuevo gremio que ya fracturó el control de César Orta. Ante la pérdida de privilegios y el riesgo de ver debilitada su fuerza en las próximas negociaciones salariales, la dirigencia del SITAUDI ha recurrido al mecanismo de respuesta rápida del T-MEC en un intento desesperado por torpedear la llegada del nuevo sindicato, escalando un conflicto interno que amenaza con contaminar el clima laboral de la planta en San José Chiapa.
La reciente sentencia de la autoridad laboral a favor del Sindicato Auténtico de Trabajadores de Audi México (SAUTAM) ha encendido las alarmas en el SITAUDI. Este fallo obliga a la empresa a otorgar licencias sindicales permanentes a los integrantes del nuevo comité ejecutivo, permitiéndoles operar formalmente dentro de la planta, un terreno que hasta ayer era propiedad exclusiva del gremio del Secretario General César Orta.
Para el SITAUDI, esta no es solo una cuestión de “libertad sindical”, sino una amenaza directa a su supervivencia financiera y política. Al perder la exclusividad, también se pone en riesgo el flujo de cuotas sindicales y la capacidad de presión que el sindicato mayoritario ejercía sobre la empresa durante las revisiones contractuales.
En un intento por frenar el avance del SAUTAM, el SITAUDI ha comenzado a gestionar una queja ante el Mecanismo de Respuesta Rápida del T-MEC. Su estrategia consiste en alegar supuestas irregularidades en la conformación del nuevo grupo, buscando que instancias internacionales intervengan para anular el reconocimiento que las autoridades mexicanas ya otorgaron legalmente.
Sin embargo, el SAUTAM cumple con los requisitos básicos que marca la Ley Federal del Trabajo, la cual establece un mínimo de 20 trabajadores en activo para conformar un sindicato. A pesar de ser una organización minoritaria en comparación con los miles de afiliados del SITAUDI, su existencia es totalmente legítima bajo las reformas laborales vigentes que promueven la democracia y el pluripartidismo sindical.
Intimida SITAUDI a los agremiados del SAUTAM
La tensión ya puede percibirse de lejos en las líneas de producción. El SAUTAM denunció que el pasado 15 de diciembre la dirigencia del SITAUDI realizó “entrevistas” intimidatorias a trabajadores que optaron por migrar al nuevo gremio, intentando forzarlos a regresar bajo la amenaza de represalias o la pérdida de beneficios.
“Nadie puede ser obligado a pertenecer a un sindicato distinto al de su elección. La afiliación sindical es un derecho humano y laboral protegido por la ley. Ni la empresa ni el SITAUDI pueden tomar represalias”, advirtió el Comité Ejecutivo del SAUTAM en un comunicado dirigido a la base trabajadora.
Este choque de fuerzas ocurre en un momento crítico para Audi México. Se avecina una nueva negociación salarial, y con dos sindicatos en el mapa, la estabilidad de la planta podría tambalearse. El SITAUDI teme que la división de la base trabajadora le reste “músculo” frente a la empresa, mientras que el SAUTAM busca posicionarse como una alternativa “más transparente y menos viciada“.
El hecho de usar el T-MEC por parte de un sindicato para atacar a otro es un movimiento inusual que podría ser contraproducente. Si el panel internacional determina que el SITAUDI es quien está obstruyendo la libertad de asociación de los obreros que prefieren al SAUTAM, las cosas podrían teñirse de otro color para César Orta.
Por ahora, la gerencia de Audi México, encabezada por Octavio Saucedo Cobos en el área de Recursos Humanos, se ha comprometido a vigilar que cesen los actos de hostigamiento. No obstante, el clima laboral en San José Chiapa ha quedado oficialmente fracturado, con un sindicato histórico que se resiste a compartir el poder y un gremio naciente que promete dar la batalla por cada afiliado.
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