Los extorsionadores buscan nuevas formas de obtener dinero de sus víctimas, por lo que pasaron de ser montachoques a montapeleas, involucrando a las mascotas que pasean con sus dueños en parques o calles de la ciudad.
Los montapeleas buscan a otros perritos con dueño para provocar una pelea que genere un daño en la mascota del extorsionador para, posteriormente, exigir dinero a la víctima para la atención del canino.
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Al igual que los montachoques, los montapeleas suelen ser agresivos cuando la víctima de la extorsión se niega a pagar los “daños”, por lo que amenaza e, incluso, agreden físicamente a sus víctimas con tal de obtener dinero.
Este nuevo modus operandi es aún discreto, pero poco a poco han incrementado los casos de personas que reportan ser víctimas de los nuevos montapeleas. Asimismo, han señalado lo peligroso de este tipo de extorsión, pues la salud y la vida de las mascotas se ve comprometida con el ataque.
Ante este tipo de situaciones, se recomienda pasear a las mascotas con una correa o pechera para evitar que se alejen y lleguen a ser víctimas de los montapeleas. Asimismo, vigilar el entorno para evitar que otras personas se acerquen demasiado con otro o varios canes.