Tras el homicidio de Jaziel N., un adolescente de 14 años asesinado en la comunidad de La Sabana, el clima de tensión persiste. Habitantes de la zona han solicitado una multa de cinco millones de pesos como sanción para la familia de David N., primo de la víctima y señalado como responsable del crimen.
La exigencia fue planteada por el presidente auxiliar de La Sabana, Prudencio Xelo, durante una asamblea comunitaria. En dicha reunión, el edil también advirtió que dicha sanción no estaría destinada a la familia de la víctima, sino a la autoridad auxiliar, como castigo por los disturbios generados en la comunidad.
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La molestia social escaló al grado de que, tras la asamblea, se reportó que un grupo de aproximadamente 150 personas tenía la intención de dirigirse a la vivienda donde residían David N., su hermana Alía y su madre. Cabe mencionar que Alía presuntamente disparó al aire en la comunidad de Teruel la misma noche del crimen y, desde entonces, no se conoce su paradero. Vecinos especulan que podría haberse ocultado por temor a ser detenida.
Ante el riesgo de un intento de linchamiento o de ataque a la propiedad, autoridades municipales implementaron un operativo preventivo con al menos ocho patrullas, apoyadas por unidades de seguridad estatal, desplegadas sobre la carretera federal Atlixco-Izúcar, a la altura de La Trinidad Tepango.
La tensión comenzó a disminuir luego de que se confirmó que David N. ya fue detenido y que este lunes enfrentará su primera audiencia judicial por el homicidio de su primo.
Aunque el intento de agresión fue contenido, persiste la polémica en torno a la multa exigida por la autoridad auxiliar, cuyo destino no sería la reparación del daño a la familia afectada, sino una especie de sanción económica a manos del gobierno local, lo que ha generado nuevas dudas e inconformidades entre los pobladores.
