Agua de Puebla ha reforzado sus labores de limpieza, mantenimiento y desazolve en la capital y su zona conurbada. Hasta la fecha, la concesionaria ha intervenido más de 1,300 kilómetros de la red de drenaje, como parte de su Programa Integral de Mantenimiento Anual.
Este programa contempla el desazolve de 2,500 kilómetros de red, además de la atención a 12 pasos a desnivel, 20 vialidades principales y la limpieza de 17 mil accesorios pluviales y residuales, como rejillas, alcantarillas, bocas de tormenta y pozos de visita. Gracias a estas labores, se han retirado más de 19 mil metros cúbicos de azolve, es decir, lodo y basura acumulados en el sistema.
Durante cada evento de lluvia, Agua de Puebla despliega 12 cuadrillas especializadas y 14 unidades hidroneumáticas, que operan de forma permanente y coordinada con el Ayuntamiento de Puebla. Actualmente, sus esfuerzos están enfocados en 31 de los 59 puntos críticos identificados por el Comité Tláloc.
Uno de los retos recientes ocurrió el pasado 12 de julio, cuando una lluvia atípica dejó una lámina de agua de hasta 58 milímetros. En ese contexto, las brigadas de Agua de Puebla atendieron con prontitud más de 30 puntos con fuertes encharcamientos.
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La empresa hizo un llamado a la ciudadanía a evitar tirar basura o escombros en calles y barrancas, ya que se estima que el 80% de las inundaciones son causadas por desechos que obstruyen las rejillas y el drenaje pluvial.
