Con flores blancas colocadas en el Árbol de la Esperanza, en el zócalo de la capital, integrantes del Colectivo Voz de los Desaparecidos dieron cierre a su marcha conmemorativa del 8M.
La movilización, que se extendió por aproximadamente tres horas, inició a las 10:00 horas y concluyó alrededor de las 13:00 horas en el centro de la ciudad. Como acto simbólico, cada madre buscadora depositó una rosa en memoria de sus seres queridos.
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Junto al monumento, ubicado en las inmediaciones del Palacio Municipal, también fueron colocadas fotografías de personas desaparecidas, tanto niñas como mujeres adultas, en un llamado a la visibilización de sus casos.
Tras el mensaje final de María Luisa Núñez, representante del colectivo Voz de los Desaparecidos, los participantes comenzaron a dispersarse, aunque algunos decidieron permanecer en la explanada del zócalo para las siguientes actividades por el 8M.