Los arrancones volvieron a encender las alarmas en Puebla: entre 15 y 16 vehículos de alta gama estuvieron a punto de convertir la zona de Zavaleta en una pista clandestina, pero el operativo de la Dirección de Tránsito Municipal logró frenarlos antes de que iniciaran la carrera.
El director de Control de Tránsito, Simón Cano Martínez, confirmó que fue la unidad de inteligencia de la corporación la que detectó la concentración de los autos, organizada para realizar competencias ilegales en plena vía pública. El operativo municipal intervino y dispersó a los participantes.
Cano explicó que este tipo de reuniones se ha vuelto recurrente en la ciudad y representan un riesgo directo para automovilistas y peatones. Por ello, cada semana se montan dispositivos especiales —principalmente jueves, viernes y sábado— para inhibir las carreras que intentan colocarse en zonas como Zavaleta, Hermanos Serdán, Atlixco o el Circuito Juan Pablo II.
El funcionario agregó que hace apenas cinco semanas se evitó otro intento de arrancones, pero ahora de mil 500 motociclistas que planeaban recorrer múltiples bulevares de la ciudad. En esa intervención se aseguraron 28 motos y se emitieron 108 infracciones.
En paralelo, recordó que en Puebla ocurren 48 hechos de tránsito diarios, muchos ocasionados por conductores distraídos con el celular, y que la estrategia municipal se centra en reforzar la vigilancia en los puntos donde se detecta mayor riesgo, tanto por velocidad como por concentración de vehículos.
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