Cindy, una joven estudiante, lucha por su vida luego de que la atropellara un conductor en estado de ebriedad, el pasado 22 de marzo en la carretera estatal Tehuacán-Teotitlán, en el tramo San Diego Chalma-San Pablo Tepetzingo en Tehuacán. A pesar de las pruebas en su contra, el responsable quedó liberado horas después del accidente.
La joven la han sometido a tres cirugías debido a las múltiples fracturas que presenta en diversas partes del cuerpo, además de presentar un traumatismo craneoencefálico severo. Su estado de salud es delicado y sus familiares han tenido que asumir costos médicos que ya superan los 150 mil pesos.
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De acuerdo con testigos, la joven regresaba a su hogar ubicado en el municipio de Ajalpan a bordo de su motocicleta, cuando la impactó por una camioneta Toyota blanca, el conductor, identificado como Hugo “N”., no se detuvo tras el impacto y continuó su marcha, pese a que su vehículo quedó con solo tres neumáticos. Finalmente, lo interceptó por las autoridades a la altura de las oficinas del OOSAPAT, donde se confirmó que viajaba en estado etílico.
Sin embargo, a pesar de la gravedad del caso y de las pruebas existentes, Hugo quedó liberado horas después del accidente, aparentemente solo sancionado administrativamente por una falta menor: haber miccionado en la vía pública.
Familiares de la joven exigen justicia y temen que el responsable goce de influencias que lo protejan, acusando al Ministerio Público de negarse a recibir la denuncia formal en su contra.
“Lo dejaron libre como si nada hubiera pasado, mientras mi hija está luchando por su vida, queremos justicia y que se haga responsable de los gastos médicos”, declaró la madre de la víctima.
Ante esta situación, la familia de Cindy ha iniciado una movilización para exigir que el caso no quede impune y que las autoridades actúen con apego a la ley.