Ante los recientes hechos de violencia registrados en Tehuacán, donde dos personas golpearon brutalmente a un comerciante de frutas y en respuesta un grupo de moto repartidores quemó la vivienda y el vehículo de los presuntos agresores, el Obispo de Tehuacán, Gonzalo Alonso Calzada Guerrero, emitió un contundente llamado a la paz y la reconciliación.
En un mensaje dirigido a la comunidad católica, expresó su profunda preocupación por los múltiples actos de violencia que se viven en la región y en todo el país e hizo un llamado urgente a trabajar juntos en la construcción de una sociedad más justa y fraterna.
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En el comunicado emitido el 22 de mayo, el Obispo lamentó el dolor, miedo e incertidumbre que la violencia ha sembrado en las familias y comunidades.
Afirmó que, no se puede aceptar dicha situación como normal y exhortó a los ciudadanos a convertirse en “artesanos de la paz”, promoviendo la justicia, el diálogo y el respeto.
“Como creyentes y como ciudadanos, asumamos nuestra responsabilidad”, expresó el líder religioso, destacando que, la paz no es solo la ausencia de guerra, sino la creación de un ambiente justo y fraterno.
Asimismo, dijo que, los obispos de México han insistido en que la paz es tarea de todos y requiere un compromiso firme con la dignidad humana y el estado de derecho.
Invitó a la comunidad a rechazar toda forma de violencia, fomentar la reconciliación, promover la justicia social y orar sin cesar por la paz.
El obispo también pidió que, cada familia sea testimonio de paz en sus hogares y comunidades, haciendo de las parroquias centros de encuentro y unidad.
