La tarde del pasado 20 de junio, Julián de tan solo 10 años, enfrentó la muerte de cerca.
Lo que parecía una tarde común, terminó marcada por el miedo, luego de que un cocodrilo atracará a Julián de 10 años, en una calle inundada en la colonia Integración Familiar al norte de Ciudad Madero.
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El menor había salido junto con su primo a jugar y caminaron entre el agua y el lodo que se encontraba en las calles tras las fuertes lluvias.
Sin embargo, al momento de subir una banqueta, un cocodrilo de un metro de largo emergió del agua y mordió la pierna derecha de Julián.
Su primo, quien también es menor de edad, lo cargó y llevó corriendo hasta su casa. En la vivienda, su padre, lo llevó al Hospital Civil de Ciudad Madero, donde activaron el protocolo de atención de atención para casos de mordedura de cocodrilo.
La madre de Julián, Liliana Sánchez, relató que la herida que dejó parecía como el ataque de un perro.
La familia Julián vive cerca de una laguna que con los años, la han invadido por basura, escombro y desechos e incluso animales muertos.
Para, Liliana esa contaminación es un riesgo, pues cada que llueve fuerte, los cocodrilos salen de la laguna.
“Fue un susto terrible”, cuenta la madre, “pero gracias a Dios está bien”. Hoy Julián se recupera de la herida, pero la preocupación persiste por la presencia de los reptiles a sus alrededores.
