El fin de semana, la familia Huerta Ramírez y allegados, sufrieron una pérdida irreparable, la muerte de Diana, hija del conductor y periodista Carlos Martín Huerta, quien murió tras sufrir un derrame cerebral y que a su vez, la llevó a convertirse en una heroína de pacientes que están en espera de algún órgano; pues la joven, se convirtió en una donadora, dándole vida a otros, a través de su muerte.
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“Hoy hay personas que viven con la muerte de mi hija; donde quiera que estén, que Dios los bendiga”, fueron las palabras del periodista Carlos Martín Huerta.
A través de sus redes sociales detalló cómo fue la muerte de su pequeña Diana, a quien despidieron entre porras y aplausos no solamente en la funeraria donde la velaron; sino también, en el hospital donde se mantuvo, pues Diana, se convirtió en una donadora de órganos.
Diana y su papá se preparaban para trabajar en La Feria de Puebla pero los planes cambiaron por completo
De acuerdo a la narrativa de hechos que dio el periodista, la mañana del pasado viernes, él y su hija se alistaban para ir a trabajar a La Feria de Puebla, pero al filo de las 11:30 horas, todo cambió, pues Diana tuvo un derrame cerebral.
De inmediato, Diana fue llevada al Hospital Ángeles para que pudieran salvarla. Los médicos lograron estabilizarla en dos ocasiones pero todo complicó.
“Nos dieron 72 horas para saber el daño real en su organismo, induciéndola en coma”, dijo Carlos Martín.
Todavía el sábado en la mañana, el periodista se acercó a su hija, platicó con ella, le dijo cuánto la amaba y que la extrañaría. En ese momento, sus ojos se cerraron y se consumó la muerte cerebral.
Diana, y su familia ya habían platicado alguna vez en convertirse en donadores cuando alguno de ellos partiera y la joven es la primera en convertirse en una heroína que a través de sus órganos, les dio vida a otros.
Arzobispo Víctor Sánchez Espinosa estuvo con la familia en todo momento
El periodista, confirmó que su familia recibió una infinidad de muestras de cariño y apoyo sincero; entre ellos, el del Arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, quien los acompañó a depositar las cenizas de Diana.
“Diana, amor de mi vida, sigue cuidando de mí como siempre lo hacías, sigue atenta de mis necesidades, ayúdame a enfrentar y resolver mis problemas y cuando te vuelva a encontrar será para agradecerte toda la felicidad que siempre le diste a mi vida. Te adoro y así será por siempre, mi preciosa Diana”, expresó Carlos Martín.
