Uno de los capos más buscados en Puebla fue capturado por autoridades estatales y federales en la colonia Barrios de Arboledas. Julio César ‘el Padrino’, líder del cártel de ‘Los Toscano’, fue sorprendido a bordo de un Audi con drogas y un arma de fuego. Este grupo delictivo se dedica al narcomenudeo, extorsión, homicidios y otros delitos de alto impacto, y mantiene una disputa territorial en colonias del centro y sur de la capital poblana.
Este peligroso individuo, con un amplio historial delictivo, fue detenido por la Secretaría de Seguridad Pública y la Marina.
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Regresó a la ciudad de Puebla tras permanecer más de diez años encarcelado en el penal de San Miguel, en el de mediana seguridad de Tepexi de Rodríguez y en un penal de máxima en el estado de Chiapas por secuestro, homicidio y otros delitos, que lo llevaron a convertirse en un criminal de alta peligrosidad y con gran poder entre las bandas que se disputan el control de diversas zonas de la ciudad. Entre estas bandas se encuentran la de ‘el Chupón’ y la organización ‘Fuerza 2000’ de Federico N ‘el Fede’.
Julio César se hacía llamar de diferentes formas, como ‘el Señor J.’, ‘el Brother’ y/o ‘el Padrino’. Al momento de su detención, intentó cambiar su nombre para pasar desapercibido, pero las labores de inteligencia de las autoridades permitieron identificarlo de inmediato como el líder de ‘Los Toscano’. Este individuo ya había sido detenido años atrás.
‘El Padrino’ y su historial criminal
Con base en información compartida acerca de este capo, en 2008 fue encarcelado por secuestro y otros delitos. Fue enviado al penal de San Miguel, donde conoció y unió fuerzas con José Christian N ‘el Grillo’ para mantener el control al interior del centro penitenciario. Once años después, debido a su alto grado de peligrosidad, fue trasladado a un penal en Chiapas.
Tras conseguir su libertad, Julio César N comenzó a protagonizar atentados para demostrar su poder. Se le atribuye la balacera en el tianguis de Los Lavaderos, que dejó un saldo de dos muertos y cinco heridos.
Este evento marcó un punto de inflexión en la disputa por el control de la venta de estupefacientes en la zona. Una de las bandas en disputa es la de ‘el Chupón’ liderada por Abraham N considerado el último ‘pez gordo’ de la dinastía de ‘el Grillo’, lo que lo mantiene en conflicto con ‘el Padrino’.
Un duro golpe al crimen organizado
Las autoridades estatales y federales afirmaron que Julio César N era considerado un objetivo prioritario. Su captura en la colonia Barrios de Arboledas representa un duro golpe contra el crimen organizado, ya que desestabilizó a una de las bandas con mayor poder en el estado.
Al momento de su detención, a ‘el Padrino’ se le aseguraron 67 bolsas de plástico con cristal o metanfetamina, 55 con cocaína y un envoltorio con marihuana. También se le incautó un arma de fuego calibre .380, abastecida con 18 cartuchos útiles, y una fuerte cantidad de dinero, todo encontrado en un vehículo Audi de color gris con placas de Veracruz.
