El cuerpo del hombre encontrado muerto el pasado fin de semana en el corazón del Centro Histórico de ciudad de Puebla corresponde al de Mario Alberto Rodríguez Guerrero. El joven, originario de Monterrey, estaba reportado como desaparecido tras salir de su trabajo para dirigirse a una reunión en el Centro Comercial Solesta.
Sus familiares han expresado su desconcierto y exigen una investigación a fondo para esclarecer cómo fue que llegó al lugar donde presuntamente perdió la vida.
Mario Alberto, de veinticuatro años de edad, fue encontrado muerto al día siguiente de que sus seres queridos reportaran su no localización. Había salido de su empleo en la torre Valcob, ubicada en la Reserva Territorial Atlixcáyotl.
Su cuerpo yacía tendido sobre el arroyo vehicular de la 11 Poniente, entre la 3 y 5 Sur del Centro Histórico de Puebla. Sin embargo, al momento en que las autoridades realizaron el levantamiento de cadáver, este se encontraba en calidad de desconocido.
La Desaparición tras salir de la Oficina
De acuerdo con la información compartida en la ficha de búsqueda emitida por la Fiscalía de Puebla, el joven regiomontano tenía su residencia laboral en Puebla, donde se desempeñaba como empleado en la torre Valcob en la Atlixcáyotl. Fue el 3 de octubre cuando salió de su lugar de trabajo con el objetivo de dirigirse a una aparente reunión en el Centro Comercial Solesta.
Desde ese instante, sus familiares y allegados dejaron de tener noticias de él. Se desconoce si llegó a su destino o qué pudo haber ocurrido en el trayecto. Sus seres queridos comenzaron a buscarlo por teléfono, pero al no obtener respuesta, las alertas se encendieron, lo que los llevó a presentar la denuncia correspondiente por su desaparición ante las autoridades.
Muerte por Atropellamiento en el Corazón de la Ciudad
A la mañana siguiente de la desaparición, policías estatales informaron sobre la presencia de un hombre tirado en la vía pública, específicamente sobre la 11 Poniente, entre 3 y 5 Sur, en pleno Centro Histórico.
Aunque inicialmente se manejó de manera extraoficial que el cuerpo presentaba huellas de violencia, más tarde, paramédicos y policías confirmaron que el sujeto tenía lesiones visibles derivadas de un probable atropellamiento. Al parecer, el cuerpo de Mario Alberto presentaba marcas de llantas y, según fuentes consultadas por Diario CAMBIO, fue arrastrado por unos quince metros por un vehículo ‘fantasma’.
El conductor del vehículo logró darse a la fuga sin dejar más detalles, lo que complica la identificación del responsable. Esta circunstancia, sumada a la diferencia entre el lugar al que se dirigía (Solesta) y el lugar donde fue encontrado muerto (Centro Histórico), ha generado gran extrañeza y dudas entre sus seres queridos.
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