Silvia Tanús Osorio, titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte informó que el Golf Negro que conducía Luz María M iba a 140 kilómetros por hora en los instantes previos a provocar la carambola múltiple frente a Vía San Ángel, que cobró la vida de Mayca, la joven empleada bancaria que fue víctima colateral; así como de Paola, la acompañante de la conductora que terminó prensada y murió horas después.
La titular de la SMT confirmó que Luz María M, conductora del vehículo cuya identidad reveló el pasado sábado Diario CAMBIO, sí estaba participando en una competencia de velocidad o “arrancón” a plena luz del día. Para la administración estatal, este evento no puede ser considerado un accidente fortuito.
El análisis técnico de la SMT arroja que el Golf negro involucrado, el cual portaba placas foráneas para evadir sanciones locales, no solo excedió los límites en el momento del impacto, sino que mantenía una velocidad constante de alto riesgo durante su trayecto.
Tanús Osorio fue enfática al señalar que el exceso de velocidad transforma un medio de transporte en un instrumento de muerte, especialmente cuando se superan con creces los rangos de seguridad establecidos para las vialidades urbanas de alta densidad.
“Vehículos con placas de otros estados fueron captados minutos antes de los siniestros, rebasando los 140 kilómetros por hora. Velocidad es que no solo violan la ley, sino que convierten a un automóvil en un arma mortal”, sentenció la funcionaria durante la rueda de prensa matutina.
La gravedad del caso se acentúa al revelar que el vehículo responsable era un “infractor serial”. Solo en los últimos dos meses, el sistema de fotomultas registró al menos tres ocasiones en las que la unidad superó los 120 kilómetros por hora, e incluso alcanzó una velocidad “inaceptable” de 180 kilómetros por hora, evidenciando una conducta de riesgo sistemática.
Finalmente, la SMT lamentó que esta imprudencia terminara afectando a ciudadanos que cumplían con sus jornadas laborales, como fue el caso de Mayca, la víctima fatal. Con estos datos técnicos en mano, el Gobierno del Estado justificó la implementación de operativos inmediatos para detener en flagrancia a quienes, escudados en placas de otras entidades, rebasen los límites de velocidad y pongan en peligro la vida de las y los poblanos.
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