Un día antes, el sábado 10 de mayo, otra patrulla de la Policía Municipal de Izúcar —la unidad M789— se vio envuelta en un aparatoso accidente sobre la carretera Internacional a Oaxaca, a la altura del bulevar Revolución. La versión preliminar indica que los agentes iban en persecución de un vehículo, sin luces ni sirena encendidas, lo que derivó en una carambola.
El impacto afectó a dos vehículos particulares: una camioneta Chevrolet y un auto Subaru, cuyos ocupantes reportaron solo golpes menores, aunque con daños considerables en sus unidades. Testigos aseguran que la patrulla circulaba a alta velocidad.
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Este hecho refuerza la preocupación ciudadana sobre el actuar imprudente de algunos elementos policiacos al volante. Organizaciones locales y vecinos exigen transparencia en la investigación y sanciones claras en caso de negligencia. Mientras tanto, la confianza en el desempeño operativo de la corporación continúa erosionándose.
