Ernesto Orea, alias ‘el Orea’, uno de los internos más temidos del penal de San Miguel, fue trasladado al Centro de Reinserción Social (CERESO) de Tepexi de Rodríguez luego de ser identificado como el presunto responsable de alterar el orden y encabezar una red delictiva al interior del reclusorio.
De acuerdo con fuentes penitenciarias, ‘el Orea’ habría estado detrás de los recientes escándalos ocurridos en el penal, incluyendo la fiesta clandestina con mujeres, cervezas y música que fue grabada y difundida en redes sociales, exhibiendo el nivel de corrupción que persiste en San Miguel.
“El Orea”, cabecilla del caos en San Miguel
El reo, identificado como líder de la banda ‘Los Orea’, habría planeado la fiesta con el objetivo de desestabilizar la gestión del director Jorge Delgadillo, en aparente venganza y solidaridad con el ex director del penal, Gilberto Serna, y su operador, el Comandante Tauro, Jesús Francisco.
Según las indagatorias, la grabación de la fiesta no fue un simple acto de indisciplina, sino una maniobra calculada para evidenciar a las autoridades y provocar un cambio en la estructura de mando dentro del penal.
El priista Javier L.Z. entre los involucrados
Entre los internos implicados también se encuentra Javier L.Z., político priista señalado por el feminicidio de Cecilia Monzón, quien presuntamente participó en la organización del evento junto a Jair N ‘el Yayo’, Jaime N ‘el Flaco’ y Joaquín N ‘el Marmolero’.
Los reportes apuntan a que estos reos integraban el círculo cercano de ‘el Orea’ y actuaron bajo sus órdenes para coordinar la entrada de mujeres y alcohol al penal.
Lucha de poder entre ‘Los Orea’ y ‘el Pavón’
El traslado de ‘el Orea’ a Tepexi se habría ordenado también para contener una guerra interna entre bandas que se disputan el control del penal.
Mientras ‘Los Orea’ buscaban desplazar al grupo de Marco Antonio N ‘el Pavón’, acusándolo de extorsionar y cobrar cuotas excesivas, este último habría logrado mantenerse en San Miguel, pues no aparece entre los reos trasladados.
De esta manera, ‘el Pavón’ conservó su lugar en el penal, mientras que ‘el Orea’ y su grupo fueron removidos por considerarse el foco principal de inestabilidad.
Ya había sido denunciado en protestas
Meses antes, familiares de internos ya habían señalado a ‘el Orea’ como extorsionador y líder sanguinario, durante una manifestación en el Periférico Ecológico.
Los inconformes exigieron su traslado por considerar que operaba desde adentro una red de cobro de cuotas y amenazas.
Con su salida, las autoridades buscan recuperar el control del penal de San Miguel, convertido en escenario de pugnas, corrupción y privilegios para ciertos reclusos.
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