La exdiputada Laura Artemisa García Chávez se despidió del Congreso local y se hizo la heroína al mencionar que recibe el cargo de la Secretaría del Bienestar con la responsabilidad de atender a los damnificados de la Sierra Norte, para que los apoyos les lleguen y continuar con el censo.
Con tono triunfal, García Chávez aseguró que su prioridad será “atender a los damnificados de la Sierra Norte” y que los apoyos “llegarán a quienes más lo necesitan”. Sin embargo, el anuncio llega en un momento en el que la tragedia se ha convertido en escaparate político para más de un aspirante.
“La Secretaría de Bienestar tiene que hacer un censo en específico para las necesidades, mucho trabajo por delante, pero sé que el rumbo ya está marcado y solo me sumo para seguir sirviendo a Puebla”, dijo García Chávez al despedirse del Congreso local, donde deja más pendientes que resultados.
En su mensaje, insistió en que “el reto es muy grande” por las necesidades que enfrenta el estado tras el paso del huracán Jerry, y habló de censos, diagnósticos y rutas de apoyo.
“El reto es muy grande por los momentos que está viviendo Puebla en el sentido de las grandes necesidades que hay por las tragedias que no se han terminado aún, que todavía hay por delante para poder lograr el censo de las condiciones de la Sierra Norte”, afirmó.
Artemisa García deja el liderazgo sin resolver problemas básicos en el recinto legislativo, desde goteras en el techo hasta los topes afuera del edificio, pero ya habla de “reconstrucción y bienestar” desde su nuevo cargo.
Laura Artemisa García inicia su nueva etapa en Bienestar más como aspirante que como servidora pública, buscando protagonismo en medio de la emergencia y vistiendo de altruismo lo que parece una estrategia política.
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