La dirigencia estatal de Morena, encabezada por Olga Lucía Romero Garci-Crespo y el presidente del Consejo Estatal, Andrés Villegas Mendoza, redujo drásticamente la meta de afiliación en Puebla de un millón de militantes anunciados al arranque del año, apenas proyectan la mitad, 500 mil militantes, aunque cada uno ofrece distintas cifras al respecto.
Romero asegura que actualmente se cuenta con alrededor de 500 mil registros, mientras que Villegas sostiene que la cifra real supera los 360 mil.
Las contradicciones entre ambos no solo exhiben falta de coordinación, sino que alimentan la percepción de que existe un freno deliberado para no alcanzar el objetivo inicial de un millón de afiliados.
Con un padrón menor al esperado, Morena en Puebla podría llegar a 2026 con un músculo territorial disminuido, afectando sus posibilidades de movilización.
Lo que inició como una campaña para “afiliar a un millón de poblanos” terminó convertido en un nuevo frente de disputa interna, alimentando sospechas de un boicot político más que de un problema operativo.
➡️ Únete a nuestro canal de WhatsApp para mantenerte informado al estilo de DIARIO CAMBIO