El exgobernador de Puebla y hoy director del Instituto Nacional de Migración (INM), Sergio Salomón Céspedes Peregrina, dejó en claro que no renunciará a la protección estatal que actualmente tiene asignada a través de cuatro policías estatales, al asegurar que el dispositivo de seguridad no es un privilegio personal, sino una medida necesaria para resguardar a su familia mientras él desempeña funciones en la Ciudad de México.
Tras la aclaración de la Secretaría de Seguridad Pública del estado —que precisó que Céspedes cuenta con cuatro escoltas y no con 16, como se había señalado en un inicio— el exmandatario confirmó que la asistencia policial que recibe es estrictamente legal y se ajusta a los protocolos establecidos para exfuncionarios.
“No, a ver, ya hicieron la aclaración las autoridades pertinentes, que es a quien les corresponde. Al final de cuentas, nosotros buscamos siempre un entorno seguro para nuestras familias y para todos, pero siempre dentro de lo que marca la ley”, expresó Céspedes Peregrina.
A pregunta expresa de que si reincorporaría a la SSP a los cuatro escoltas que le proporcionaron, luego de que asumió el cargo como director del Instituto Nacional de Migración, Céspedes respondió:
“Las cuatro personas que tengo no. Es algo que necesito yo. Tengo a mi familia acá y yo estoy allá (Ciudad de México) trabajando”, señaló.
El ahora titular del INM subrayó que, al estar radicando temporalmente en la capital del país por sus nuevas responsabilidades, su principal preocupación es la integridad de quienes permanecen en Puebla.
La SSP detalló la semana pasada que, los cuatro escoltas asignados al exgobernador pertenecen a un grupo especializado dentro de la misma dependencia y los incorporaron a tareas de protección.
Además, el vicealmirante Francisco Sánchez González precisó que otros exgobernadores, como Melquiades Morales Flores y Guillermo Pacheco Pulido, también cuentan con personal de seguridad —dos y cuatro elementos, respectivamente— mientras que José Antonio Gali Fayad no tiene escoltas asignados.
Pese a la polémica generada en torno al número de escoltas y al uso de recursos estatales, Sergio Salomón reiteró que cumplirá con la disposición oficial y que mantendrá el esquema de seguridad mientras sea necesario para su familia, siempre bajo los criterios que marca la ley.
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