A pesar de la expectativa y emoción generada por el concierto de Shakira en el Estadio Cuauhtémoc, propietarios de palcos han expresado su molestia e indignación ante la falta de organización por parte de los encargados del evento, ya que no se les han respetado sus espacios, negándoseles la posibilidad de ingresar al show.
Uno de los casos que más ha resonado es el de un palco cuyo propietario denunció que, al intentar hacer el cambio de boletos necesario para acceder al evento, no fue reubicado adecuadamente y ni siquiera pudo estar presente en el evento.
“Cuando fui a cambiarle los boletos, no me reubicaron y ayer no me dejaron entrar. ¿Quién tiene boletos? Porque hoy voy de nuevo con mis sobrinos chiquitos y no podré estar en mi palco”, declaró el afectado en redes sociales.
La denuncia se ha replicado en distintos foros digitales, donde más propietarios aseguran haber tenido experiencias similares, señalando falta de información clara, fallas en la logística de reubicación, y una pésima atención al cliente por parte de los organizadores del evento.
Los palcos, que son espacios privados dentro del estadio adquiridos a largo plazo por sus dueños, suelen contar con derechos contractuales de uso, incluso durante eventos masivos como conciertos. Sin embargo, en este caso, varios asistentes aseguran que sus lugares no fueron respetados o fueron reemplazados sin previo aviso.
Hasta el momento, ni la administración del Estadio Cuauhtémoc ni la empresa organizadora del concierto han emitido una respuesta oficial sobre estas quejas.
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