El funcionario de Petróleos Mexicanos (Pemex), Bernardo Bosch Hernández, padre de la recién coronada Miss Universo 2025, Fátima Bosch, difundió una carta en la que rechazó los señalamientos que lo vinculan con presuntas irregularidades dentro de la paraestatal y negó haber tenido cualquier relación comercial previa con el empresario Raúl Rocha Cantú, copropietario de la Organización Miss Universo.

La declaración pública surgió tras la polémica generada por el triunfo de su hija, luego de que el pianista franco-libanés Omar Harfouch, exjurado del certamen, cuestionó la transparencia del concurso y sugirió un vínculo de negocios entre Bosch y Rocha. A ello se sumó la difusión de un contrato otorgado en 2023 por Pemex a una empresa de Rocha, así como versiones sobre una supuesta sanción administrativa contra el funcionario.
Bosch aclaró que cuenta con 35 años de trayectoria —27 de ellos en Pemex— y afirmó que no existe sanción vigente en su contra. Explicó que en 2019 impugnó una resolución de la entonces Secretaría de la Función Pública y que el Tribunal Federal de Justicia Administrativa la anuló por falta de sustento legal. También negó haber influido en el certamen y calificó como “falsos” los señalamientos sobre presuntos beneficios.
Asimismo, precisó que conoció a Rocha hasta septiembre de 2025, durante el concurso Miss Universo México, y subrayó que sus funciones en Pemex no incluyen procesos de licitación.
La controversia escaló cuando Fátima Bosch denunció agresiones en redes sociales derivadas de las acusaciones. En paralelo, Rocha rechazó cualquier vínculo con la familia y anunció acciones legales, mientras Pemex se deslindó de cualquier participación en el certamen.
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